La gasolinera de Manuel Azaña exige a Cort que ejecute la orden de cierre de la estación de Avingudes
La propiedad se reúne con la regidora Mercedes Celeste para reclamar la clausura y advierte de que acudirá a los tribunales en caso de que siga operando de manera irregular
Califican de "irrisorias" las multas que está pagando por mantener su actividad pese a que en 2008 caducó la concesión

Gasolinera de la calle Manuel Azaña, en Nou Llevant. / B. Ramon
La propiedad de la gasolinera de Nou Llevant, en la calle Manuel Azaña, exige al Ayuntamiento de Palma que cierre la estación de la calle avenida Gabriel Alomar i Villalonga, en situación irregular desde 2008, cuando caducó la concesión que había disfrutado durante 50 años. En caso de que el Consistorio no acceda y se agote la vía administrativa, estudian acudir a los tribunales y a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
El propietario y el encargado de la gasolinera de Nou Llevant se citaron con la regidora de Hacienda y Govern Interior, Mercedes Celeste, para reclamar que Cort ejecute la orden de cierre que tiene desde la pasada legislatura porque opera sin título para ocupar espacio municipal, una instrucción avalada por el Tribunal Superior de Justicia de Baleares en 2023.

Estación de servicio de Gabriel Alomar i Villalonga. / B. Ramon
Del mismo modo, reprocharon a la regidora que las multas que pagan desde ese año, en torno a 7.500 euros cada ocho días, "son irrisorias" teniendo en cuenta que esta estación factura miles de euros cada día. Así se expresó el abogado de la propiedad, Mateu Juan, de Buades Legal, presente en la reunión. El letrado señaló a preguntas de este periódico que ambas gasolineras son competencia directa porque se ubican a pocos metros de distancia, por lo que consideró que se produce un "grave perjuicio" para la estación de Nou Llevant al operar su competidora sin disponer del título correspondiente.
Celeste expresó que la voluntad del Consistorio es permitir que la gasolinera de Gabriel Alomar i Villalonga siga operando algunos años, y estudia la manera de hacerlo para que encaje en la legalidad. Del mismo modo, la regidora les indicó que en el caso de la estación de plaza Progrés sí existe la determinación de que cierre porque, además de operar de manera irregular, ocupa un espacio en el que está prevista una importante reurbanización. Asimismo, la estación ha tenido problemas de filtraciones en el subsuelo.
En todo caso, les informó la concejala, habrá un desenlace este 2025.
En un escrito enviado al departamento de Govern Interior, la propiedad de la estación de Manuel Azaña reclama "el lanzamiento inmediato de la estación de servicio de Gabriel Alomar, solicitando para ello el auxilio de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad". Asimismo, pide al Ayuntamiento que proceda a licitar una nueva concesión del espacio de modo que pueda concurrir cualquier empresa interesada.
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