Los socorristas de las playas de Palma irán a la huelga a partir del domingo

Los trabajadores denuncian que no se aplican las mejoras laborales acordadas la temporada pasada

Sin vigilancia en las playas a partir del lunes

Sin vigilancia en las playas a partir del lunes / Manu Mielniezuk

Los socorristas de las playas de Palma han anunciado que van a protagonizar una huelga indefinida a partir del próximo día 21. Es decir, a partir del domingo las playas de la ciudad no dispondrán del servicio de vigilancia, porque los trabajadores, que cobran el salario mínimo, se sienten engañados, tanto por la empresa concesionaria, como por el Ayuntamiento de Palma.

La pasada temporada este colectivo ya convocó una huelga. Sin embargo, la movilización se paralizó tras llegar a un acuerdo en el Tamib. Se acordaron mejoras a nivel operativo y económico. Sin embargo, cuando ya ha empezado la temporada y este personal especializado ya ha empezado a trabajar, ninguna de las mejoras acordadas se ha cumplido.

Según detalló Julián Delgado, secretario de la Unión de Socorristas, la plantilla de estos trabajadores es de 45 personas en temporada baja y 60 en plena temporada turística.

El portavoz del colectivo explicó que en el acuerdo del año pasado el Ayuntamiento de Palma se comprometió a convocar un nuevo concurso, que incluía mejoras sustanciales, tanto en el servicio, como en un mayor sueldo para los trabajadores. Sin embargo, cuando ya han pasado dos semanas del mes de mayo este nuevo concurso, para elegir al concesionario de este servicio, todavía no se ha convocado y hace imposible que las mejoras acordadas se vayan a aplicar esta temporada.

Julián Delgado criticó con dureza que a fecha de hoy todavía no se hayan instalado las infraestructuras mínimas en las playas de Palma. La mayoría de torres de vigilancia están anticuadas, no se han instalado pasarelas y en muchos de los baños públicos de las playas ni siquiera hay instalación eléctrica. Esta falta de mejoras repercute, no solo en los socorristas, sino sobre todo en los ciudadanos que acuden a la playa. Delgado señaló también que en el área de enfermería de las playas tampoco se dispone del mínimo servicio, lo que hace imposible que un socorrista atienda correctamente a un usuario que haya podido tener un accidente en la playa.

Sobre las pasarelas que permiten que las personas con movilidad reducida puedan disfrutar del mar tampoco se han instalado hasta la fecha. Estas personas enfermas no pueden llegar hasta la orilla empujando sus sillas de rueda por la arena, lo que hace imposible que puedan disfrutar de algún baño en el mar.

Esta plantilla está contratada por la empresa Emergencia Setmil S.L., a la que también los trabajadores responsabilizan de no aplicar las mejoras. La empresa, según Delgado, se excusa en que el Ayuntamiento de Palma no les ha mejorado las condiciones del contrato de concesión y, por lo tanto, no tiene dinero suficiente para asumir los acuerdos que se aprobaron el año pasado. La concesión del servicio de socorrismo terminaba el año próximo. Sin embargo, la empresa concesionaria se comprometió a renunciar al último año de contrato, para facilitar que el Ajuntament convocara un nuevo concurso, en el que mejorara las condiciones, tanto de instalaciones, como de mejora de sueldo para los trabajadores. Sin embargo, al final la medida que se ha acordado ha sido prolongar el contrato, según señaló el portavoz del colectivo.

Julián Delgado detalló que con el sueldo que reciben los socorristas no pueden ni siquiera acceder a alquilar una casa. Muchos viven en furgonetas o incluso en sus propios coches y utilizan las duchas de las playas para asearse.

Los socorristas no tienen intención de cumplir los servicios mínimos que se pueden marcar tras el anuncio de la huelga. El año pasado estos servicios fueron del cien por cien, por lo que fue inútil que los trabajadores plantearan una huelga, porque no les permitieron desarrollarla. Los socorristas creen que si tan importantes son, ya que tienen que cubrir la totalidad de los servicios, que tanto la empresa concesionaria, como el Ayuntamiento de Palma les reconozca su valía profesional y les aumente el sueldo.

Salvo que se produzca un acuerdo de última hora, a partir del próximo domingo las playas de Palma se quedarán sin servicio de vigilancia.