El director gerente de la Empresa Muncipal de Transportes, Mateu Marcús, ha asegurado que todos los buses que salen de cocheras para realizar un servicio disponen de la rampa para personas con discapacidad plenamente operativa o, al menos, el conductor no ha comunicado una incidencia a talleres para que los mecánicos revisen el dispositivo.

Pese a lo anterior, Marcús ha reconocido que "en ocasiones" la rampa no funciona, como ocurrió la semana pasada en dos ocasiones con el bus 100, circunstancia que ha sido denunciada por Pilar Byaina, la madre de una joven con movilidad reducida que utiliza una silla de ruedas eléctrica para desplazarse.

El gerente de la empresa ha recordado que si bien el miércoles la rampa no funcionó y la chica ya no pudo subir al autobús, el viernes, sí que pudo subir, aunque durante el trayecto "ocurrió alguna cosa que hizo que dejara de funcionar" por lo que un mecánico de la empresa se trasladó hasta la parada para, en 20 minutos, proceder a su arreglo.

Pilar Biayna y su hija Yaiza en la parada de la EMT en la plaza España de Palma. Manu Mielniezuk

Marcús afirma asimismo que, desde que están renovando la flota con la incorporación de cien nuevos buses, los incidentes con las rampas para personas con movilidad reducida "han bajado muchísimo", aunque acepta que en los buses más antiguos estas incidencias se dan más a menudo, por lo que indica que se trata de una cuestión "que debemos mejorar, para que todas las rampas funcionen en todo momento, como debería ser", afirma.