La tercera y última tanda de vales de descuento de PalmaActiva ha sido tan exitosa como fugaz. Si a las nueve de la mañana se sacaron 30.000 bonos, a las seis de la tarde ya se habían canjeado el 90%, la inmensa mayoría durante las primeras horas del día.

En algunos comercios de Palma se pudo ver ayer a grupos de ciudadanos incluso antes de las 9:00 horas apostados en los locales, aguardando la apertura de los casi 300 establecimientos en los que se pueden adquirir los bonos.

No es la primera vez que los descuentos, que deducen 20 euros por cada 35 de compra, desatan la locura en el pequeño comercio de Ciutat. Lo que no se había visto hasta ahora es la «picaresca» de los más astutos, que se ha colado en esta última remesa de bonos y ha generado malestar entre algunos usuarios.

Si bien los vales se ponían a disposición de los clientes a las nueve, había tiendas que ya los habían agotado todos una hora después... aunque por el local apenas habían pasado clientes. Algunos vecinos sospechan que hay tiendas, especialmente comercios de ropa de marca en el centro de Palma, que han aprovechado la jugosa iniciativa para apalabrar los descuentos con su clientela habitual, aunque la norma prohíbe reservar bonos y establece que solamente se pueden asignar en el momento de pagar la compra del artículo.

También se pudo ver ayer a algunos consumidores que recolectaron las identificaciones personales de sus conocidos y canjearon todos los vales a la vez (cada ciudadano tiene ocho) para hacer compras más sustanciosas de lo habitual, aprovechando que hay establecimientos que no suelen comprobar que el titular de los bonos se corresponde con la persona que realiza la compra. Después de una época de penuria para el comercio, bienvenidos sean los bonos de donde vengan mientras estimulen las compras.

Colas en la puerta de una tienda de instrumentos musicales antes de las 9.00h. | JOSEP CAPÓ

Fuentes de la Cámara de Comercio de Mallorca, que presta apoyo técnico a la exitosa iniciativa de Cort gestionando el canje de los vales, aseguran a este diario que en el organismo no consta que haya fraude alguno en ningún comercio. Asimismo, estas mismas fuentes advierten que «no se puede vigilar tienda por tienda» y que si algún ciudadano tiene conocimiento de que se realizan estas prácticas, debe denunciarlo al ayuntamiento de Palma: «De todas formas, confiamos en que los comercios están haciendo lo correcto», manifestaron.

Igualmente, desde la Cámara advierten que las bases de estas subvenciones prohíben expresamente reservar bonos, y también disponen textualmente que hay que «verificar la identificación de los usuarios consumidores y su edad, requiriéndoles que le exhiban el DNI o número de identificación de extranjero». Si se incumplen estas disposiciones o se detecta cualquier práctica indebida, avisan, el establecimiento puede ser sancionado y quedar fuera de la campaña.

Con los descuentos canjeados ayer, se invirtieron tres millones de euros en el pequeño comercio de Palma. Un total de 104 establecimientos han agotado sus vales y otros 105 solo tienen diez bonos: se trata de cifras récord en campañas comerciales de este tipo. Desde la primera fase de esta iniciativa, ya se han canjeado 83.500 bonos.

Cabe recordar que para poder beneficiarse de los 20 euros de descuento se debe realizar una compra mínima de 35 euros, por lo que el descuento total puede alcanzar los 160 euros por cada ciudadano. No hace falta descargar previamente los vales como en otras ocasiones, puesto que se solicitan directamente en los comercios adheridos. Eso sí, según las bases la persona que realiza la compra debe enseñar su DNI; el suyo, y el de nadie más.