Vecinos de viviendas situadas en la calle Joan Maragall han denunciado la existencia de «ratas XXL», en alusión al considerable tamaño de estos animales en el parque Albert Camus, conocido también popularmente como «el del barco pirata» por la presencia de una estructura de estas características en su zona de juegos infantiles.

Miguel Ángel Vicedo, uno de los vecinos denunciantes, manifiesta que «parece que las ratas están domesticadas» puesto que se acercan a escasos metros de personas y menores sin que se asusten o espanten.

También parecen «inmunes» a la presencia de la colonia de gatos existente en la zona, hasta el punto de que «parece que se ha establecido una convivencia entra ambas poblaciones ya que los gatos no cazan a las ratas». De hecho, desde el Ayuntamiento se atribuye la proliferación de estos roedores a la existencia de una colonia incontrolada de felinos que disponen de comida y bebida, que también es aprovechada por las ratas.

Vicedo vive en una casa situada frente al parque desde el pasado mes de abril, cuando el problema ya existía. Denunció también que se trata de una zona a la que van también a dormir, especialmente en verano, personas sin techo, pudiéndose observar en muchas ocasiones restos de papel higiénico y de comida.

«Incluso yo mismo quité un colchón abandonado lleno de suciedad», afirmó. Otro de los peligros de la zona, que está situada junto a un colegio al que acuden 400 menores, consiste en la presencia en el parque desde hace tiempo de un «socavón», que si bien está señalizado con una cinta, «constituye un auténtico peligro para los niños que se pueden caer dentro». Otro vecino ha denunciado también la presencia de jeringuillas usadas en las inmediaciones del colegio. Desde el servicio de protección de plagas del Ayuntamiento se ha indicado que se trata de un problema conocido y que está en vías de tratamiento. De hecho, se ha indicado que, desde el pasado mes de enero se han realizado hasta siete intervenciones de desratización, desinsectación y desinfección en este parque.

Las dos últimas se realizaron los pasados días 30 de septiembre y 18 de octubre. Tras recibir un aviso ciudadano se procedió a inspeccionar el parque en busca de ratas o indicios de su presencia. Se ha encontrado la madriguera y se ha procedido a reforzar la intervención.