El barrio palmesano de la Bonanova acelera su transformación iniciada hace dos años. El Ayuntamiento de Palma ha concedido esta semana licencia de nueva construcción para cuatro nuevos chalés en un solar situado en la confluencia de las calles Francesc Vidal i Sureda y Antoni Mulet, frente al Queens Sport Centre.
El pasado mes de marzo fue demolida la antigua casa que ocupaba el terreno, una vivienda tradicional del barrio que poseía un gran jardín mediterráneo de pinos con acceso en la calle Francesc Vidal i Sureda y también en Antoni Mulet, así como con vistas al bosque de Bellver y a Illetes. En su lugar y tras la parcelación del terreno, se levantarán cuatro nuevas viviendas unifamiliares desarrolladas en sótano y dos plantas y con piscina anexa, que formarán un conjunto y cuentan con presupuestos de edificación para cada una de las cuatro unidades que oscilan entre los 575.000 y 617.000 euros, según se detalla en la licencia municipal.
El plazo de ejecución de los cuatro chalés es de 24 meses, según consta en los permisos de construcción concedidos, el promotor es la empresa mallorquina Construcciones Vidal y el arquitecto, Enrique Javier Balaguer. Los trabajos de parcelación y adecuación del terreno.
Con estas cuatro nuevas edificaciones ya son once los nuevos proyectos de construcción desarrollados solo en la calle Francesc Vidal i Sureda, dos plurifamiliares de lujo ya terminados y nueve unifamiliares a punto de finalizar o todavía en obras, uno de ellos una reforma integral. Los precios no bajan en ningún casos de los 10.000 euros el metro cuadrado.
También en el barrio de la Bonanova, en un espacio entre la misma calle Francesc Vidal i Sureda y Puig de Pollença, esperan licencia de nueva construcción siete nuevos chalés, desarrollados también en dos plantas y con garaje, piscina y jardín, según proyecto del arquitecto Juan Rotger Arbona.
La empresa constructora alemana Gigaron espera obtener el permiso municipal para empezar las obras en verano de 2023, según informa a sus clientes. Las parcelas de las nuevas viviendas tienen una superficie de 561 metros cuadrados cada una y se ubican en un terreno en pendiente que hasta ahora estaba libre de edificaciones entre las dos calles antes señaladas. Para acceder a estas viviendas será necesario desarrollar un nuevo vial.
