La movilidad sostenible es la asignatura que marca la excelencia de cualquier ciudad y Palma no es una excepción. La resistencia al cambio, las dudas o los intereses particulares no pueden ser un impedimento para que desplazarse de forma cómoda, segura y sostenible sea la norma en Ciutat. Ésta es la idea en la que coincidieron los participantes en la mesa redonda Palma, cap a la mobilitat sostenible celebrada el pasado miércoles en el Club Diario de Mallorca.

El coloquio, que forma parte del ciclo Palma ciutat de futur organizado por Diario de Mallorca y Ayuntamiento de Palma con la colaboración de Binter, contó con la participación de Inés Rey, alcaldesa de A Coruña, Joana Maria Seguí Pons, catedrática de la UIBe integrante del grupo de investigación sobre turismo, movilidad y territorio; y Francesc Dalmau, teniente de alcalde de movilidad sostenible. Mar Ferragut, periodista de Diario de Mallorca, fue la encargada de moderar el debate. El acto finalizó con la intervención del alcalde José Hila

El evento se abrió con las palabras de bienvenida de Marisa Goñi, directora de Diario de Mallorca, quien destacó que «Palma, como todas las ciudades del mundo, tiene el reto de implantar una movilidad sostenible eficiente que sea una verdadera alternativa al coche privado, el auténtico rey de nuestras calles» con todo lo que ello implica: transporte público asequible y puntual, fomento de la movilidad en bicicleta o la implantación del «deseado tranvía», entre otras acciones. En este sentido Goñi subrayó la necesidad de poner en el centro al peatón y que para ello se requiere «un diseño de ciudad que permita al ciudadano resolver las necesidades básicas sin grades desplazamientos». Así mismo, la periodista señaló que otro de los retos es mejorar la conectividad de la ciudad con el resto de la isla. 

Más que facilitar los desplazamientos de las personas, la movilidad sostenible es uno de los ejes más importantes de la política de cualquier municipio ya que afecta de forma directa y contundente al modelo de ciudad. Restar espacio y protagonismo al vehículo privado implica descongestionar el tráfico, ganar espacios para los peatones, reducir emisiones y aumentar la seguridad vial, entre otros beneficios.

Un modelo de ciudad europea

Sin embargo, tal y como señaló Inés Rey durante la entrevista realizada por Mar Ferragut, «hay un sector de la población que avala y disfruta las actuaciones y otro más conservador que ofrece resistencia». Por ello, Rey se mostró partidaria de «hacer mucha pedagogía, consensuar, dialogar y poner en común». La alcaldesa de A Coruña, invitada a la mesa redonda para explicar su política de movilidad, señaló que su planteamiento parte de que «A Coruña tenía que mirarse en esas ciudades europeas que han apostado por una movilidad sostenible, buscar un modelo de ciudad orientado a la agenda 20/30 de los objetivos de desarrollo sostenible y pensar en esa ciudad del futuro que podamos empezar a vivir».

Los cambios en movilidad contribuyen a la mejora de la salud mental

Inés Rey - Alcaldesa de A Coruña

Rey apuntó que la pandemia aceleró la llegada de la movilidad sostenible al dedicar calles y espacios urbanos en los que la gente pudiera pasear y hacer deporte con seguridad durante la desescalada. Las calles de preferencia peatonal y la reducción de la velocidad máxima, fueron medidas que se tomaron en todos los barrios de la ciudad y que, pasada la pandemia, se han consolidado. «En el paseo marítimo, ‘robamos’ varios carriles a la calzada y ahora los vamos a ampliar con los fondos Next Generation porque dedicar seis carriles para los coches y uno para los ciudadanos no es amable ni sostenible ni de futuro».

El conjunto de actuaciones que también incluyen un transporte público «eficiente y muy utilizado», el rediseño del carril bici y la renovación de la flota de bicicletas municipales, se ha realizado, según indicó Rey, en todos los barrios y no solo en los céntricos. 

Con todo, la alcaldesa de A Coruña admitió que una de las asignaturas pendientes son las conexiones entre la ciudad y su área metropolitana entre la que se realizan numerosos desplazamientos. «He echado de menos que la administración autonómica que tiene las competencias en el transporte metropolitano sea capaz de hacer que se adapte a las necesidades urbanas y crear esa red que te permita salir de tu casa sin necesidad de coger el vehículo privado».

Implantar la movilidad sostenible no permite pasos atrás, aunque Rey es partidaria de «poner las medidas en común y hacerlas entre todos». El cambio de mentalidad, sobre todo entre los jóvenes, está influyendo en el éxito de iniciativas como el sistema de préstamo de bicicletas, pero más allá de la popularidad de las decisiones tomadas se halla la evidencia de mejoras visibles: «Las políticas municipales afectan a todo y estos cambios ayudan a bajar la siniestralidad, a tener menos emisiones y contribuyen a la mejora de la salud mental que es un tema del que hablamos mucho pero que relacionamos poco con las políticas que se están llevando a cabo». En este sentido Rey destacó que poder interactuar con otras personas en un entorno seguro y amable, donde hay contacto «contribuye notablemente a tu mejora emocional». 

Alternativas al uso del coche

Implantar un modelo de movilidad sostenible eficiente implica conocer las necesidades y los hábitos de los ciudadanos en este aspecto. Desde la UIB Joana Maria Seguí aportó datos sobre cómo se mueven los ciudadanos de Palma. Seguí quiso constatar en primer lugar que Palma en los últimos 30 años ha aumentado su población un 40%. La propia configuración de la ciudad, que la investigadora define como «muy segmentada en usos y funciones , propicia si no se toman medidas, un uso indiscriminado del coche». Los altos índices de motorización en Palma, 530 turismos por cada mil habitantes, avalan esta afirmación. 

El transporte público tiene la obligación de buscar la justicia social y la equidad»

Joana Maria Seguí - Catedrática UIB

Por primera vez, gracias a la elaboración del Plan Director Sectorial de Movilidad en Baleares de 2018, se tienen una fotografía bien detallada de cómo es la movilidad en las islas puesto que también incluye los desplazamientos de los turistas. Seguí citó algunos datos relevantes como que en Palma, el 45% de los desplazamientos se realizan en transporte privado, con una media de 3,5 desplazamientos por persona y día. La movilidad obligada, por estudios o trabajo, supone el 34% de los desplazamientos y mayoritariamente se realiza en transporte privado, en torno al 56%. La movilidad no obligada está más relacionada con la marcha a pie o en bici.

Por tipo de actividad, los estudiantes son los que más se desplazan en transporte colectivo mientras que las personas dedicadas al trabajo doméstico eligen la movilidad no motorizada. Las personas activas utilizan más el transporte privado. Seguí señaló que también hay diferencias de género en la movilidad. A pesar de que en Palma hay un porcentaje mayor de mujeres son los hombres los que más se mueven, cuatro desplazamientos por día, mientras que las mujeres realizan una media de 3,5, mayoritariamente de movilidad no obligada, no motorizada y en autobús. En cuanto a la movilidad obligada en transporte motorizado individual, el hombre es el usuario mayoritario con una diferencia de ocho puntos respecto a la mujer. 

La investigadora remarcó que la movilidad está relacionada con el urbanismo ya que «los desplazamientos se producen porque hay una separación entre los orígenes y los destinos en una ciudad para satisfacer la demanda de bienes y de servicios». En este sentido remarcó que «los movimientos que genere este urbanismo han de estar centrados en personas». 

Palma es la ciudad que más ha incrementado los usuarios del transporte público

Francesc Dalmau - Regidor de Urbanismo

El ciudadano se mueve por numerosos motivos, desde la obligación de acudir a su puesto de trabajo al desplazamiento realizado por ocio o placer. Cualquier cambio que afecte a su movilidad es materia sensible y en ocasiones genera resistencia. Francesc Dalmau apeló a acoger «el cambio con la ilusión de que lo que va a venir será mejor». El regidor de movilidad de Palma señaló cómo el recién aprobado Plan de Movilidad Urbana Sostenible será el instrumento con el que se configure la ciudad soñada. «Los datos aportados por Joana Maria Seguí nos indican donde mejorar» y puso como ejemplo la movilidad ciclista que se ha potenciado con el rediseño de los carriles, llegando a más barrios y aumentando el servicio de Bicipalma, de forma que la bicicleta sea una alternativa real que permita disminuir el uso del coche. En cuanto al transporte público admitió la necesidad de crear conexiones transversales, conectando barrios sin tener que pasar por el centro. Mencionó que «se ha llevado a cabo la primera remodelación de la red» y aportó como dato positivo que «Palma es la ciudad de España que más ha incrementado los usuarios del transporte público. El ciudadano vuelve a confiar en el transporte público algo que se ha potenciado con los descuentos impulsados por el Gobierno y que en Palma llegan al 50%». 

En este sentido Joana Maria Seguí subrayó que «el tranporte público tiene la obligación de buscar la justicia social y la equidad» y abogó porque «repensar la cuestión de los bonos para decidir qué colectivo debe incentivarse».

La movilidad sostenible es la política más transformadora en una ciudad»

José Hila - Alcalde de Palma

José Hila, subió al escenario para clausurar la jornada y se declaró «un apasionado de la movilidad sostenible, para mí es la política más transformadora en una ciudad». Los datos objetivos avalan, según Hila, que no se puede continuar con el anterior modelo de movilidad y recordó que el cambio a una más sostenible crea resistencia a pesar de que «todos sabemos en esta ciudad que una peatonalización siempre es buena y que nunca se quiere volver atrás». «Hay que ser valientes y enfrentarse a esos colectivos aunque sus argumentos sean totalmente defendibles, pero que muchas veces no son el interés general. Tenemos que tomar esas decisiones». Tras recordar que la siguiente apuesta en materia de transporte público es el tranvía, Hila reconoció que el nuevo reto que se plantea es de qué manera se va a utilizar todo el espacio público que se va a recuperar.