El PP de Palma denunció ayer la mala praxis del Consell de Mallorca en la declaración de interés general de Puntiró, por las irregularidades en la compra del inmueble, y advirtió de que la finca «no es lugar idóneo para construir un centro asistencial para menores».

Según el PP, la adquisición se ha hecho «pisoteando competencias municipales e ignorando a los vecinos», por lo que el PP pedirá en el pleno del ayuntamiento de Palma que se retire la propuesta, informó el partido en un comunicado.

El presidente del PP de Palma, Jaime Martínez, explicó que ni el antiguo Plan General de Ordenación Urbana ni el nuevo permiten que en la finca de Puntiró se pueda desarrollar una actividad «como la que pretend”e el Consell de Mallorca». «Tampoco el Plan Territorial lo autoriza», advirtió Martínez, que recalcó que el uso contemplado para ese inmueble es el de vivienda, «no el de equipamiento, por lo que se debería otorgar un cambio de uso que el Ayuntamiento no puede conceder, porque está prohibido».