La ministra de Transportes y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, y la de Defensa, Margarita Robles, han firmado esta mañana en Madrid un protocolo que permite "desbloquear" del desarrollo urbanístico del antiguo acuartelamiento de Son Busquets, en el que se prevé la construcción de entre 800 y 900 viviendas todas ellas de promoción pública y en régimen de alquiler. Tal como se pone de manifiesto en el protocolo firmado esta mañana, previo al convenio que ambas administraciones suscribirán posteriormente, la Entidad Pública Empresarial de Suelo (SEPES) será el organismo que se encargará de su desarrollo.

Al acto de la firma han asistido conseller de Moviliad y Vivienda del Govern Balear, Josep Marí, el alcalde de Palma, José Hila, y la teniente de alcalde de modelo de ciudad, Neus Truyol.

El protocolo establece que los aproximadamente 110.000 metros cuadrados de las instalaciones del antiguo acuartelamiento situado entre las carreteras de Valledemossa y Sóller pasan a ser de propiedad del ministerio de Transportes y Agenda Urbana para su desarrollo urbanístico.

Con anterioridad a esta firma, el ministerio de Agenda Urbana había consensuado con la concejalía de Modelo de Ciudad el programa urbanístico que se desarrollará en estos terrenos después de que en el pasado mandato se rechazara por parte del equipo de gobierno municipal las previsiones contempladas en el Plan Especial de Reforma Interior (PERI) aprobado inicialmente con gobiernos municipales del PP.

Este nuevo programa urbanístico que ahora se deberá plasmar en un nuevo PERI, que será desarrollado por Modelo de Ciudad, incluye la reserva de suelo necesaria par la construcción en Son Busquets de entre 831 y 900 viviendas en función de la superficie que finalmente tengan las casas.

Todas ellas tienen que ser de protección pública y en régimen de alquiler. Asimismo, el nuevo planeamiento pactado permitirá como máximo otros 55.000 metros cuadrados de usos terciarios, entre los que se incluye el comercial, administrativo de coworing y producción digital, entre otros, de los cuáles casi la mitad deberán integrarse en edificios residenciales.

Otros 21.000 metros cuadrados se destinarán a espacios libres públicos, además de equipamientos, entre los que se incluirán un centro de Educación Infantil, un espacio polideportivo y un edificio destinado a equipamiento sociocultural.

Igualmente, el Plan Especial que ahora deberá tramitarse y aprobarse, para proceder después a la ejecución de las obras de urbanización y la posterior construcción de los nuevos edificios, contemplará condiciones de diseño por lo que respecta a la diversidad social de usos, integrando la vivienda asequible en la actividad económica.

También se preservará parte del patrimonio existente, manteniendo en lo posible parte delos actuales edificios para otros usos y el arbolado. El conjunto conformará una "superisla" en la que el tráfico interno será minoritario, permitiendo solo el esencial e imprescindible.

Si bien ya se había acordado que el nuevo PERI sería redactado por Modelo de Ciudad, los trabajos serán supervisados por un "jurado" mixto integrado por representantes del ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, el Govern balear y el Ayuntamiento de Palma.