Los descuentos del transporte público también llegan hoy a la red de autobuses de la EMT. A partir de ahora y hasta el próximo 31 de diciembre, los usuarios pagarán la mitad por los trayectos que realicen, exceptuando el billete sencillo, que no se incluye en esta medida.

Con la entrada en vigor de las nuevas tarifas, el bono mensual de 20 viajes pasará de costar 13 euros a 6,5. El de 50 trayectos, de 29 euros a 14,5 y el bono mensual de viajes ilimitados, que incluye toda la red de buses de la EMT, costará 18,5 euros en lugar de los 37 actuales.

También se reducen hoy los precios para los usuarios con una tarificación especial. Por ejemplo, los estudiantes universitarios pasarán de pagar 20 euros a 10 euros al mes por los abonos ilimitados, al igual que las familias numerosas, que pagarán 5 euros en lugar de 10.

El regidor de Movilidad Sostenible, Francesc Dalmau, aseguró ayer en rueda de prensa que el ayuntamiento de Palma mantendrá los precios reducidos el año que viene con independencia de si Madrid continúa financiando la medida: «No sabemos cuál es la intención del Gobierno a partir del 1 de enero, pero podemos afirmar que los bonos de transporte no volverán a ser lo mismo, revisaremos las tarifas para reducirlas», manifestó Dalmau.

La medida tendrá un coste total de 1.393.193 euros, asumida en un 30% por el Gobierno central

De momento, y hasta el 31 de diciembre, el Ejecutivo central asume el 30% de los descuentos de la EMT, lo que supone un importe de 717.529 euros, mientras que Cort se hace cargo del 20% restante, es decir, 575.664 euros que pagará el Consistorio.

De esta manera, desde Cort calculan que la medida tendrá un coste total de 1.393.193 euros. Dalmau espera que esta iniciativa provoque un aumento de la demanda, aunque de momento la EMT no ha reforzado el servicio para absorber un posible aumento de usuarios.

El regidor señaló que el objetivo es promover el transporte público colectivo y reducir el uso del vehículo privado, además de fomentar iniciativas con un «impacto real» en las economías domésticas, especialmente en las familias más afectadas por la inflación y la subida del precio del combustible.