La Asociación Hoteleros Platja de Palma (AHPP) criticó ayer que el Ayuntamiento «incumpla sus propias ordenanzas», porque estando con la temporada turística «a pleno rendimiento», la zona «está totalmente en obras del propio Consistorio o autorizadas por el mismo».

Así lo manifestó la asociación en nota de prensa, recordando en este sentido que la Ordenanza Municipal Reguladora del Ruido y las Vibraciones obliga al cumplimiento del control horario a toda persona física o jurídica que realice obras en el municipio, «y Cort está haciendo caso omiso a esta obligación». «Primero fue el retraso de casi un mes en la finalización de las obras de rehabilitación de las fuentes y ahora, como si no fuera suficiente con todas las obras de Emaya, sorprende que el Ayuntamiento autorice en pleno mes de mayo el levantamiento de la calle Amílcar, en pleno Arenal de Palma, sin informar a residentes, comerciantes ni hoteleros», lamentaron.

Por los ruidos y los horarios de las obras, los hoteleros apelaron «al sentido común» y pidieron que el Consistorio «se ponga en la piel de los que conviven en la zona y tienen que sufrir las innumerables molestias».

Mala imagen

En este punto, hicieron referencia a la decisión «temporal y circunstancial» a la que Cort se acogió en 2020, permitiendo el ruido por obras motivado «por el retraso significativo del inicio de la temporada turística, pero ahora no es el caso y no tiene justificación».

Así, solicitaron «celeridad» y que se paralicen todas las obras que no sean necesarias y que puedan realizarse en los meses de temporada baja, «reduciendo al máximo las molestias que están ocasionando y la imagen que se está dando».