El Casal de Barri y la biblioteca municipal de Son Sardina continuarán ocupando «en precario» las instalaciones actuales situadas en un local que hace años fue propiedad de Sa Nostra y que ahora, después de numerosas vicisitudes, ha quedado en manos de CaixaBank.

En la junta de gobierno celebrada ayer quedó desierto el concurso convocado para alquilar locales en la barriada con el fin de albergar estos dos servicios municipales debido a que no se presentó ninguna oferta. Según el teniente de alcalde de Participación Ciudadana, Alberto Jarabo, CaixaBank está dispuesta a presentar una oferta para que se pueda seguir ocupando las instalaciones, aunque no pudo presentar a tiempo la documentación requerida.