Ya lo anunció la teniente de alcalde de Seguridad Ciudadana, Joana Maria Adrover, en el pasado pleno municipal a raíz de una pregunta del PP: el Ayuntamiento hará uso de la subvención de 150.000 euros del Govern balear que permite la contratación de seguridad privada con el fin de auxiliar a la Policía Local en el control de la normativa covid o de los efectos causados por la pandemia.

Y, en consecuencia, en la junta de gobierno celebrada ayer, se aprobaron los pliegos para la contratación de este servicio, que entraría en funcionamiento, en principio, en los meses de temporada alta y que supondría un refuerzo para dispositivo especial de verano, que ya se está negociando con los sindicatos policiales.

La aprobación de estas bases se ha realizado después de contar con todos los informes favorables por parte de los servicios jurídicos municipales, intervención y la delegación del Gobierno.

Adrover detalló que, en principio, estos informes permiten utilizar a estos agentes en sitios completamente acotados y cerrados como parques, en los polígonos industriales en el caso de que, como en temporadas anteriores, se proceda al control de los accesos por las noches de los fines de semanas con el fin de evitar la aglomeración de personas y en playas fáciles de cerrar y que dispongan de entradas y salidas bien determinadas, como puede ser el caso de la de Cala Major. La teniente de alcalde recordó que el uso de seguridad privada es algo que se viene realizando desde hace años por parte del ayuntamiento de Palma, ya que los agentes de estas empresas privadas controlan los accesos a la práctica totalidad de las dependencias municipales, exceptuando los agentes de puertas del edificio de Cort y del cuartel de la Policía Local de Sant Ferran, que siguen siendo policías locales.

Adrover explicó que, en líneas generales, el uso de seguridad privada tendrá como objeto detectar el incumplimiento de la normativa covid en zonas estratégicas susceptibles de aglomeraciones las noches de los fines de semana y aligerar el volumen de trabajo en determinados cometidos.

Lo anterior permitirá dar más eficacia al servicio policial con el fin de atender servicios urgentes o quejas no relacionadas con la covid, además de actuar cuando se detecte el incumplimiento de la citada normativa.

Insistió en que la decisión se ha adoptado con el fin de «aprovechar los recursos que nos da otra administración», con el fin de no dejar que «Palma pierda la oportunidad», sin dejar de gastar «ni un euro del presupuesto municipal en la contratación de más policías, con el objetivo de continuar aumentando la plantilla policial en este mandato y reactivar y fortalecer, entre otras unidades, la policía de barrio».