Diario de Mallorca

Diario de Mallorca

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El belén más antiguo de España, que está en Mallorca, lleva seis años cerrado

El Consell busca en las propias arcas los 350.000 euros necesarios para restaurar diversos elementos del belén de la Sang de Palma, en concreto parte del pavimento y las pinturas de la cueva, además de las figuras. El conjunto fue declarado BIC en 2003

El belén de la Sang. CONSELL

El belén de la Sang lleva ya siete navidades sin poder mostrarse al público. En total, seis años en los que se ha rehabilitado la vertiente arquitectónica del nacimiento más antiguo de Balears y posiblemente el belén en uso más antiguo de Europa; seis años en los que se han realizado diversos estudios, investigaciones y descubrimientos, pero en los que también se ha atascado la reforma de la segunda parte: la que se acometerá en parte del pavimento y las pinturas de la cueva, además de en una parte fundamental del mismo: sus figuras, actualmente en mal estado.

«Es cierto que aún no se puede visitar porque todavía falta por restaurar una parte», confirma a este periódico la directora insular de Patrimonio, Kika Coll. «El proyecto de intervención ya está listo. Lo que ahora falta es cerrar la cuestión de la financiación para poder sacar a concurso la rehabilitación de esta última fase», asegura la responsable de Patrimonio del Consell. Los trabajos están presupuestados en 350.000 euros. «Estamos mirando en los remanentes y otras posibilidades en otras partidas que pueda haber disponibles en el departamento», comenta a este diario Coll, quien recuerda que el grueso de la primera fase de los trabajos fueron ejecutados «por personal propio». «Ha sido un trabajo largo y puedo asegurar que se han hecho muchas cosas: labores de saneamiento, intervenciones en la estructura, en el tejado y en la fachada que da dentro del hospital», enumera, «y luego se ha tenido que preparar todo el expediente para poder externalizarlo», subraya. Coll no se aventura a poner fecha a la reapertura del belén. Tampoco quiere afirmar que estará listo para la Navidad de 2022. «Nos pondremos en marcha enseguida que sea posible, eso seguro, pero no quiero dar por cerrado un plazo, prefiero no vender humo», comenta. A finales de 2018, se aseguró desde el Consell a los medios que la segunda fase de la rehabilitación se licitaría en la primera mitad de 2019, algo que jamás llegó a producirse.

consell de mallorca

Los trabajos de restauración del belén -BIC desde 2003- arrancaron en diciembre de 2015. Después de una serie de estudios previos -recogida de documentación fotográfica; documentación planimétrica; estudio climático y radiográfico de las 30 figuras del belén y estudio de policromías, sales y humedades- el proyecto de rehabilitación integral de la capilla inició su fase arquitectónica. 

En este nivel, las tareas más importantes fueron hacer frente a la elevada concentración de sales y humedades de la capilla, mejorar el forjado de la estructura y reforzar la cueva de madera. «Un trabajo lento», se definió en aquel momento, al ser el belén más antiguo de Mallorca, situado en la iglesia de la Sang desde hace 170 años, pero que no fue su ubicación original. El belén de Jesús procede del desaparecido convento franciscano de Jesús de Palma. En 1843 fue trasladado a la actual capilla de la iglesia de la Sang. Las figuras de la Virgen y San José datan de 1480. Y los seis ángeles músicos también se consideran obrados en el siglo XV. De procedencia seguramente italiana, estas figuras se vinculan al taller de Pietro y Giovanni Alamanno en Nápoles

Este nacimiento tiene un gran valor artístico, pues tuvo una influencia decisiva en la iconografía de muchos otros belenes de la isla, que lo imitaron, como el de Sant Bonaventura de Llucmajor, el de Campos o el de Petra, que fueron incorporando la cueva, los ángeles músicos, estalactitas y corderos en la parte superior.

El proyecto de restauración lo promueve el Consell y en él colaboró el Ministerio de Cultura a través del Instituto del Patrimonio Cultural de España.

Descubrimiento: decorado con oro  de 24 quilates

Poco antes de la Navidad de 2018, el Consell informó de un hallazgo: que el belén de la Sang está decorado con oro de 24 quilates. Un hecho que contrasta con la ley menor del oro de los brocados de la época, que decía que tenían que ser de en torno a una pureza del 95% (el belén tiene pan de oro del 99%). También se descubrió que la Mare de Déu lucía un carbúnculo, una piedra semipreciosa que debió ser robada. Estos datos señalan la riqueza y suntuosidad de este belén, con parentescos con los belenes italianos de finales del XV. La leyenda cuenta que una tormenta trajo las figuras del de la Sang a Mallorca. Iban en un navío italiano.

Compartir el artículo

stats