Los grupos municipales de la oposición echaron en cara al alcalde de Palma, José Hila, y al equipo de gobierno los proyectos anunciados y que no han culminado. En el debate sobre el estado de la ciudad, PP, Ciudadanos y Vox, además del regidor no adscrito, Josep Lluís Bauzà, reprobaron la falta de diálogo con la ciudadanía, así como la política de movilidad y el plan Palma Camina. 

Las viviendas públicas de Son Busquets (que sigue siendo propiedad del Gobierno), el parque del canódromo y la reforma de la plaza Major y de sus galerías comerciales fueron mencionados por PP, Ciudadanos y Vox como cuestiones que no se habían materializado en este mandato y que arrastran años de demora.

También la peatonalización de Nuredduna y las críticas por la falta de diálogo con los vecinos fue tema coincidente entre la oposición, que también lamentó que el uso del catalán predomine sobre el castellano, tanto en las comunicaciones oficiales como en los premios Ciutat de Palma.

Mercedes Celeste, portavoz del PP, solo aprobó, y llegó a felicitar, al concejal de Bienestar Social, Antoni Noguera, por su gestión durante la pandemia. Celeste acusó al equipo de gobierno de trabajar por una «libertad muy sectaria»: «Eres libre si hablas y escribes en catalán; eres libre si el incivismo es tu forma de vida; eres libre si haces con tus propiedades lo que yo te digo; eres libre si no estás atado a un contrato con el Ayuntamiento».

«Si siguen destruyendo nuestra casa, lo único que va a quedar en pie es sa Feixina», concluyó Celeste.

Eva Pomar pidió la retirada del contador de árboles de la plaza España y «respeto» por la ciudad y los palmesanos y denunció que el trabajo realizado por asociaciones de vecinos había sido «descaradamente ignorado».

Pomar criticó la EMT, por «la mala conexión entre barrios, el ruido y la contaminación medioambiental», y también el plan Palma Camina, «hacia la ruina», según añadió.

Por parte de Vox, Fulgencio Coll recriminó a Hila que tras seis años de tripartito «sigue sin ser el alcalde de todos los palmesanos» y recordó la polémica con el cambio de nombres de calles consideradas franquistas.

Josep Lluís Bauzà pidió por el uso que se dará a los fondos que se habían previsto para realizar todos los proyectos municipales que ahora optan a financiación europea.