El sindicato UGT ha denunciado la no existencia de proporcionalidad entre las pruebas físicas que exigen a las mujeres que se han presentado al bolsín para peones especialistas convocado por la Empresa Municipal de Transportes (Emaya) y la edad de las aspirantes.

Prueba de ello, es que, según han puesto de manifiesto los representantes de la Federación de Servicios Públicos de UGT "más del 98% de las mujeres mayores de 50 años han suspendido la prueba de lanzamiento del balón medicinal", hecho que "deja claro que la empresa municipal no establece las herramientas adecuadas para evaluar las capacidades físicas de los aspirantes acorde a la edad".

Desde este sindicato recuerdan que lo anterior no sucede en otros servicios públicos como pueden ser los cuerpos de seguridad del Estado o los bomberos, organismos en los que se establecen criterios adaptados a la edad de los participantes.

Según este sindicato, "a esta grave carencia de organización se suma un compadreo y arbitrariedad desconcertante de los jueces en el momento de determinar quién es apto y quién no", tal como apuntan "declaraciones de multitud de participantes y testigos". En concreto afirman que "no se mide el resultado de cada lanzamiento, se adaptan lanzamientos de espalda, no se recolocan las cintas que delimitan la prueba tras cada lanzamiento, yse consideran no aptos a participantes que, para todos los testigos, habían superado la prueba de forma clara".

Por todo ello, desde UGT Servicios Públicos confían en que la dirección de Emaya to.me las medidas oportunas para subsanar esta situación, y que los responsables políticos cumplan con sus discursos y "lleven la igualdad real y efectiva a la empresa municipal".