Desde que el equipo de gobierno de Cort tiene que enfrentarse con la oposición persistente en contra de su proyecto de peatonalización de Nuredduna, el departamento de Infraestructuras que dirige la concejala Angélica Pastor da una de cal y otra de arena, aunque con la intención de que todas las actuaciones sean aplaudidas por los vecinos. Y no es el caso. Flipau amb Pere Garau, la entidad integrada en la campaña Pere Garau molt més que Nuredduna, ha denunciado otra supresión de un alcorque, que antes estaba ocupado por un árbol y que ha sido «sellado» con baldosas. En esta ocasión la actuación se ha llevado a cabo en la calle Pi i Margall, en laque se han embaldosado nada más y nada menos que tres antiguos alcorques, lo que significa que, desde el departamento de Parques y Jardines, no se prevé sustituir los ejemplares que se eliminaron en su día. El problema es que estas actuaciones ni se anuncian ni se explican. Desde Flipau recuerdan que en esta calle, que tiene una longitud de 210 metros, solo quedan 12 de los 18 olmos que había en 2015. Mientras tanto, recientemente se han instalado ocho jardineras en la plaza del mercado de la barriada en las que se han sembrado otros tantos ejemplares de hibiscus. Esta intervención de embellecimiento de la plaza supone un coste de 34.307 euros. Esta iniciativa se enmarca en un conjunto de actuaciones para la mejora de las calles y plazas de la barriada que suman una inversión de 680.000 euros.
Otro desencuentro del Tripartito, esta vez a cuenta de los inmigrantes
Desde que nos hemos ido acercando al ecuador del actual mandato, y a medida que este se ha rebasado, han ido surgiendo cada mes cuestiones que han enfrentado, por el momento solo dialécticamente y sin que se hayan producido consecuencias al menos detectables, «desencuentros» entre los distintos partidos que conforman el equipo de gobierno municipal. En esta ocasión ha sido la decisión de ceder un solar municipal situado junto a la depuradora de Sant Jordi para acoger inmigrantes, que ha recibido las críticas de Alberto Jarabo (Podemos) y de Més, por parte de Antoni Noguera, por considerar que se trata de una solución poco adecuada para albergar personas.
