Desde las nueve y media de la noche los accesos al polígono de Son Castelló están restringidos a los empleados de alguna de las empresas radicadas en esta zona y a los clientes de bares y locales de ocio que disponen de autorización para estar abiertos al público hasta las dos de la noche.

El acceso al resto de ciudadanos a esta zona de Palma está restringida y controlada por un importante dispositivo de la Policía Local, que actúa en coordinación con la Nacional, con el fin de evitar las concentraciones de personas que practican el botellón.

Se trata de un cambio en la estrategia seguida hasta ahora por el Ayuntamiento de Palma para perseguir esta práctica que, hasta el momento, se ha centrado en la disolución y dispersión de las concentraciones de personas una vez que estas ya se han formado. Con la nueva estrategia se pretende evitar la formación del grupo y que este se disperse a otras calles de la zona.

La concejalía de Seguridad Ciudadana mantiene también el dispositivo reactivo con el fin de actuar si es preciso tanto en la Platja de Palma como en distintas zonas de la ciudad como sa Feixina, como ha hecho en fines de semana precedentes.

Por su parte, la Guardia Civil, tiene previsto desplegar, a partir de las once de la noche, un dispositivo especial en las zonas de Magaluf y Punta Ballena, del término municipal de Calvià.