El ayuntamiento de Palma está estudiando la adaptación de los recibos del tratamiento de residuos sólidos urbanos o de la incineración con el fin de introducir a la hora de distribuir el gasto a pagar los los ciudadanos y empresas a criterios medioambientales y de capacidad económica.

Así lo ha afirmado esta mañana el concejal de Hacienda de Cort, Adrià García, en el transcurso de la comisión informativa previa al pleno a raíz de una propuesta presentada por el grupo municipal del PP que en principio ha sido rechazada pendiente de una posible transaccional, en la que se insta al equipo de gobierno a realizar una memoria económico financiera de la tasa del tratamiento de residuos sólidos urbanos y a presentar una nueva estructura tarifaria, rebajando el recibo según criterios medioambientales y de capacidad económica.

García recordó que desde hace años se está intentando modificar y adaptar la distribución de los recibos de la tasa de incineración que aprueba el Consell de Mallorca en función de las toneladas de basura recogidas en cada municipio y que los ayuntamientos se encargan de recaudar. Pese a las sucesivas rebajas del precio por tonelada (la última ha sido del 3%), Cort nunca las ha trasladado a los recibos que pagan los ciudadanos.