El edificio que se desplomó este lunes por la mañana en la plaza de sa Quartera carecía de una cubierta provisional que el Ayuntamiento de Palma había exigido para proteger más la deteriorada estructura. Tras una nueva inspección, los técnicos de Urbanismo han decidido este martes prolongar el desalojo del inmueble vecino hasta que se apuntale más, confirman fuentes municipales.
«Este inmueble ya había recibido un decreto del Servicio de protección de la edificación con la obligación de ejecutar medidas cautelares de instalar una cubierta provisional. Una obligación que no cumplieron», confirmó ayer el Ayuntamiento.
«La posible causa es el mal estado de la estructura, que al estar desprotegida por no disponer de cubierta, se había deteriorado», han añadido las mismas fuentes.
El lunes, mientras algunos obreros trabajaban en la rehabilitación del edificio del número 2 de sa Quartera, se derrumbaron los techos de la planta baja y del sótano, los dos que quedaban, ya que los del primer y segundo piso ya se habían retirado anteriormente, indican desde Urbanismo de Cort. En este accidente no hubo que lamentar daños personales ya que los obreros salieron del edificio alertados por un compañero que había visto cómo se resquebrajaba la estructura.
Tras el derrumbe, los Bombers de Palma desalojaron el mismo lunes el edificio contiguo por seguridad. En este inmueble, se apuntaló la planta baja y el sótano del local. Este martes se ha revisado de nuevo y se ha determinado que había que añadir más puntales y mantener el desalojo temporalmente. Una vez que se haya reforzado su apuntalamiento, los vecinos podrán volver y reabrir el local.