Vecinos de la calle Villalonga han visto con asombro cómo las nuevas farolas que el Ayuntamiento ha instalado quedan a pocos centímetros de sus balcones. De momento solo están puestos los postes, faltan las carcasas de las luminarias, con lo que la distancia aún será menor, advierten los residentes de esta calle.
Los vecinos llevan muchos meses soportando las obras de reurbanización, que comenzaron a principios de enero con la previsión de que finalizarían al cabo de medio año.
El área de Infraestructuras es la que ejecuta estas obras en el barrio, de 1,5 millones de presupuesto y con las que se han construido aceras más anchas, se está renovando el asfaltado y el sistema de recogida de aguas pluviales.
