Pasadas las doce del mediodía de ayer un fuerte efectivo policial ha conseguido ejecutar el desahucio ordenado por el juzgado de primera instancia número 23 de Palma que ha afectado a una familia integrada por una pareja y sus cuatro hijos menores de su vivienda habitual situada en el barrio del vivero.

Miembros de Stop Desahucios intentaron desde primeras horas de la mañana evitar este lanzamiento que calificaron de "brutal" por la presunta utilización de la fuerza y de la intimidación hacia los menores por parte de los agentes para sacarles del domicilio. Asimismo, denunciaron la presencia de efectivos de la Cruz Roja. Desde Stop Desahucios se asegura que el lanzamiento se realizó "tras más de una hora de coacciones llegando a ordenar a la hermana mayor que sacase al bebé y cuando se negó a hacerlo, la cogieron por la fuerza y los agentes y lo sacaron a la fuerza". Afirman asimismo que se ha vivido "una situación tan surrealista como ilegal y sin precedentes conocidos en Mallorca".

Se trata del octavo lanzaminento a instancias de un particular que ha sufrido esta familia que vivía en la calle Baltasar Valentí del barrio del Vivero, ya que los siete anteriores se habían aplazado. La familia dispone de una casa que se encuentra en reformas situada en Binissalem, a la que ahora deberán trasladarse sin que se haya tenido en cuenta la petición del progenitor, Larbi, en el sentido de aplazar el lanzamiento unos meses con el fin de que los menores puedan acabar el curso escolar en el colegio en el que han asistido hasta ahora, al tiempo que les posibilitaría finalizar la reforma que necesita la casa.