La presidenta del Govern, Francina Armengol, anunció ayer una buena nueva en relación al transporte público. Aseguró que, a finales de año, sería una realidad la total integración tarifaria entre las líneas de la EMT y las del transporte interurbano de Mallorca. En el pasado mandato, después de muchos anuncios, se consiguió que los usuarios de la tarjeta ciudadana, que se utiliza para viajar en los buses de la EMT, también pudieran utilizar este título de transporte para abonar los trayectos del metro. Fue un paso al frente, aunque falta que sea realidad el más importante: que los usuarios del transporte interurbano que utilizan la tarjeta intermodal también puedan emplearla en los buses de Palma. Esto último podrá hacerse, según la presidenta, a finales de año. Claro que estos anuncios hay que cogerlos siempre con pinzas, porque la intermodalidad ha sido una promesa recurrente en los últimos veinte años de todos los responsables tanto del transporte público palmesano como del de Mallorca. Solo que, mientras se hacía, se procedía a adquirir sistemas de validación de títulos de transporte completamente incompatibles entre sí.
Ciudadanos reclama diálogo con las entidades
Ciudadanos ha lamentado «el nulo interés» que tiene el equipo de gobierno para impulsar la participación ciudadana en Palma. La portavoz de este partido en Cort, Eva Pomar, considera que «la participación ciudadana es inexistente porque el pacto tiene nulo interés de que exista» y puso el ejemplo del proyecto de Nuredduna, e invitó al equipo de gobierno a reflexionar y abrir un proceso de diálogo.
El PP exige los bonos de descuento comercial ya
El PP ha acusado al Pacto de llevar un año «engañando a los comerciantes y restauradores» y ha exigido la puesta en marcha ya de los bonos de descuento comercial anunciados.
