La Defensora de la Ciudadanía, Anna Moilanen, ha suspendido la política de Participación Ciudadana del Ayuntamiento de Palma y ha emitido su primera "recomendación" de esta año sobre esta cuestión constatando, después de redacción de un extenso informe, la existencia "de un agravio" hacia la ciudadanía por el incumplimiento de la normativa.

Para Moilanen "es un hecho que no se cumple estrictamente la normativa en materia de participación por lo que se refiere a la redacción de la documentación que acredita los procedimientos de actuación necesarios para que la ciudadania disponga de información amplia y objetiva de todo lo que se pretende realizar, ni se acreditan los procedimientos ni las actuaciones utilizados para que la ciudadanía pueda emitir sus opiniones y sugerencias".

La Defensora ha ananizado el procedimiento utilizado por el Ayuntamiento para definir los proyectos previstos en la calle Cotlliure, la ejecución de las obras de rehabilitación de la fábrica de Can Ribas, la reurbanización u mejora de la accesibilidad de la calle Rafel Rodríguez Méndez-Eix-Barrera-Villalonga-Borguny y Concordia y, más recientemente, los de la remodelación de la Plaza Bisbe Planes y los alrededores de Sant Jordi, además del eje cívico de Nuredduna.

Si bien la Defesora afirma que todos los proyetos se han expuesto al público, tal como indica la normativa, aunque en muchos casos la ciudadanía "ya se por falta de información por desmotivación, rechazo de la realidad política o por cualquier otra razón, no han realizado las pertinentes alegaciones"

Moilanen indica asimismo que la normativa que vela por la participación activa y democrática en el municipio "no es conocida ampliamente por la ciudadanía, ni es interpretada con los mismos criterios por parte de las distintas áreas municipales". Igualmente indica la necesidad de la creación de un "observatorio de la participación contando con la colaboración de las asociacones de vecinos y entidades ciudadanas".

Por último la Defensora concluye que si bien se ha demostrado que "la participación es importante para nuestra ciudad, pero cuando llega el momento de las prioridades se tiende a dejar en un segundo término".