"No podemos engañarnos. La situación del Real Club Náutico de Palma es la más complicada a la que se ha enfrentado a lo largo de sus más de 70 años de historia. Revertirla es posible, pero requerirá mucho trabajo y muy bien coordinado", ha reconocido hoy el presidente de la histórica entidad palmesana, Emérico Fuster, ante la Asamblea de socios celebrada en el Auditòrium.

"Este trabajo es, por supuesto, de esta junta directiva, que como ya hemos dicho hará todo cuanto esté en su mano para hacer valer el derecho que no asiste", ha manifestado. "Pero la salvación del club, más allá de la cuestión jurídica, pasa por lo que casa socio, a título individual, sea capaz de aportar", ha declarado convencido en el discurso que ha pronunciado al final del acto.

"Os pido que os preguntéis que puedo hacer por mi club", ha exclamado a los socios. "Cómo puedo colaborar desde mi posición para divulgar la relevancia social, deportiva y económica de nuestra entidad. Os pido, en definitiva, una actitud proactiva en defensa de una entidad que a lo largo de su historia ha aportado muchísimo a la ciudad de Palma y que ahora, por un mero formalismo, ve peligrar su futuro", ha manifestado.

Asamblea de socios del Real Club Náutico de Palma celebrada la tarde del lunes en el Auditòrium José Luis Miró

"¿Y cómo puedo ayudar?, os preguntaréis". A lo que él mismo presidente del Real Club Náutico de Palma ha replicado: "Muy fácil: compartiendo la pasión por el club en vuestros círculos de amistades e influencia, divulgando la importante labor que desarrollamos en el campo del deporte y de la responsabilidad social corporativa, difundiendo en vuestras redes sociales los contenidos que generamos… En definitiva, siendo embajadores de la marca RCNP y haciendo público vuestro orgullo de pertenencia a esta institución".

Fuster ha recordado que el club tiene casi 2.000 familias asociadas. Y ha solicitado a la concurrencia que "la gran masa crítica que conformamos los miembros del Real Club Náutico de Palma haga oír su voz y ponga en valor su influencia en la sociedad mallorquina. Es la hora de abandonar cualquier pequeña diferencia y trabajar unidos por un mismo objetivo: que nuestra entidad perdure en el tiempo. El club necesita a sus socios y amigos más que nunca", ha concluido.

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Un informe de la Abogacía del Estado ha hizo saltar todas las alarmas en la junta directiva del Real Club Náutico de Palma el pasado mes de marzo, así como en los 2.000 socios y 400 clientes amarristas de la histórica entidad.

El informe de la Abogacía del Estado, emitido a petición del director de la Autoridad Portuaria de Balears, concluye que la naturaleza jurídica del título otorgado al Real Club Náutico de Palma es un contrato de gestión de servicios públicos y no una concesión, lo que impediría la renovación de la misma o cualquier prórroga a partir de diciembre de 2022.