Un total de 28 asociaciones vecinales y entidades, que cuentan con el apoyo de sa Federació de Veïns sa Ciutat de Palma que preside Miquel Obrador, presentaron ayer en el registro municipal un escrito en el que exigen la recuperación de la totalidad de las líneas y de su trazado que la Empresa Municipal de Transportes (EMT) cambió o eliminó en diciembre del año pasado con motivo de la remodelación de servicios que entró en vigor en enero del presente año.
Las entidades firmantes creen que, con esta medida, se garantizará «la prestación del mejor servicio y se colaborará en la mejora de la accesibilidad y calidad de vida de todos los ciudadanos y ciudadanas». Si bien en el escrito se reclama la recuperación de la totalidad de las líneas modificadas o suprimidas, tal como reconoció el presidente de la asociación de vecinos de es Pil·larí, Pedro Medina, la reivindicación se centra en buena medida en las líneas 31 de es Pil.larí, s’Aranjassa, ses Cadenes y s’Arenal con la Porta de Sant Antoni y la 32 de Sant Joan de Déu.
Ambas fueron suprimidas durante la pandemia y ahora la empresa se comprometió con los trabajadores de la EMT a recuperarlas a lo largo del presente mes de octubre. No obstante, según Mesquida, el trazado que se va a implantar va a ser el modificado en diciembre del año pasado, según el cual los usuarios de es Pil.larí, s’Aranjassa y ses Cadenes dejaban de disponer del servicio de bus y se implantaba el servicio a demanda prestado por taxis a precio del billete del autobús que deja a los usuarios en las paradas más cercanas. Los cambios en otras líneas también afectaron a vecinos de otras zonas de la ciudad como Son Espanyol, sa Indioteria o sa Garriga, entre otras barriadas.
Más de 1.800 firmas
Este cambio ya provocó las protestas de los vecinos quienes, en junio del presente año, presentaron en el registro municipal 1.874 firmas solicitando la restitución de las líneas eliminadas.
Los firmantes del escrito también solicitan una reunión con la dirección de la EMT con el fin de adquirir un compromiso conjunto de colaboración con las asociaciones vecinales con el fin de definir el trazado de las líneas adecuado a la situación geográfica y a las necesidades de cada área, teniendo en cuenta los problemas de cada una de ellas.
Igualmente, piden la destitución del gerente de la EMT, Mateu Marcús, «por su mala gestión y negligencia, por la grave situación de movilidad que sus decisiones han provocado a los usuarios, así como por la falta de responsabilidad respecto a los ciudadanos y ciudadanas».
