Una avería en la red de las conducciones de Emaya provocó ayer la inundación con aguas residuales de un tramo de calzada en el Portitxol, a la altura de la calle Manual Azaña. Durante horas, operarios de la empresa municipal trabajaron para cortar la fuga de agua y repararla.

A media mañana, una capa de agua sucia y que desprendía mal olor cubría la calzada y la zona del paso de peatones justo en el punto donde la calle Joan Maragall confluye con la autopista, a la altura de Manuel Azaña. Emaya indicó que se había producido una fuga de aguas residuales y que hasta ese lugar se habían desplazado operarios para localizar, cortar y reparar esta avería.

Tras inspeccionar la zona, Emaya informó de que se trataba de una avería, posiblemente provocada por la antigüedad de las conducciones, en la estación impulsora de aguas residuales del Portitxol, que provocó un vertido en superficie en este punto de Nou Llevant. Hasta ese lugar se había desplazado desde la planta de Son Tugores personal de la empresa, entre ellos el capataz de redes y el de mantenimiento.

Al mediodía, había ocho camiones bomba trabajando allí para evacuar el agua y se había paralizado la estación de bombeo para evitar nuevas inundaciones.

“Lo primero era parar, sacar el agua vertida y limpiar”, explicó una portavoz de la empresa municipal. 

La paralización de la estación impulsora de aguas residuales no afectó al suministro de agua potable.

Aunque ayer no se confirmó la causa de esta avería, la portavoz de la empresa apuntó como una posibilidad la antigüedad de las conducciones. Hay que recordar que Emaya tiene en marcha la renovación de las redes de aguas residuales y potable en diferentes puntos de Palma.