Un juez deberá ordenar el desalojo de las personas que continúan ocupando la edificación municipal del denominado parque de Pocoyó, en la zona verde pública situada en la confluencia de la Costa del Gas, Joan Maragall y la autovía del aeropuerto, junto al antiguo edificio de Gesa.

Próximamente finaliza el plazo de ocho días concedido por Cort a las aproximadamente 40 personas que ocupan desde hace meses este lugar para que lo abandonen de forma voluntaria, finalizando de esta forma el proceso administrtivo de desahucio. En caso contrario, el Ayuntamiento, que ha rechazado previamente el recurso presentado por algunos de estos moradores alegando que necesita superficie municipal para trasladar allí la sede del Institut Municipal d’Innovació (IMI), deberá iniciar el proceso de desahucio judicial, por lo que el desalojo, cuando se produzca, deberá ser autorizado por un juez. 

El teniete de alcalde Alberto Jarabo, recordó que en julio la Policía Local identificó a estas personas que viven en este lugar. Se les notificó el desalojo dándoles diez días para alegaciones, que fueron rechazadas, y ocho para abandonar el lugar, fecha que finaliza en breve. Paralelamente se está trabajando con el IMAS y Servicios Sociales para encontrarles una alternativa habitacional.