Las instalaciones deportivas para vehículos motorizados como pueden ser las pistas de karts, por ejemplo, no tendrán cabida en el suelo rústico de la Platja de Palma. El Ayuntamiento ha desistido de la modificación de dos artículos del Plan de Reconversión Integral (PRI) de la zona turística, instrumento urbanístico aún en vigor mientras no se haya aprobado un nuevo Plan General de Ordenación Urbana, y ha introducido una serie de modificaciones en su redacción.

De esta forma, en la última gerencia de Urbanismo se aprobó inicialmente la nueva redacción de los artículos 176 y 185 del PRI que introduce como requisito, si se quiere implantar alguno de los equipamientos admitidos en suelo rústico, "la puesta en valor del paisaje natural y cultural del ámbito" con el fin de preservar las edificaciones y los elementos existentes.

Igualmente, se obliga a que las actividades deportivas que se puedan autorizar en alguna de estas parcelas rústicas situadas en la franja entre el suelo urbano y la autopista de Llucmajor, sean no motorizadas "incidiendo en su componente ambiental y paisajístico" en lugar de hacer referencia a las prácticas deportivas relacionadas con los Juegos Olímpicos, tal como ocurre con la redacción actual.

En el caso de que se quieran implantar en estas parcelas instalaciones de energías alternativas, se deberá justificar su "aptitud ambiental y territorial además de su integración paisajística" y se suprime la referencia ahora existente a instalaciones solares o de biomasa. Igualmente, se restablece la superficie mínima, sin excepciones, de cinco hectáreas para que se pueda tramitar un Plan Especial que contemple la instalación de alguno de estos equipamientos en suelo rústico, además de mantener un mínimo del 80% de la parcela "en condiciones de permeabilidad", es decir sin asfaltar ni pavimentar. Igualmente, se rebaja considerablemente la edificabilidad máxima permitida que pasa a 0,10 metros cuadrados por metro cuadrado de superficie.

El hecho de que los cambios que se quieren introducir por parte del actual equipo de gobierno de Cort en la redacción de estos artículos, junto con la falta de documentación en relación a las exigencias legales, han obligado a desistir de la tramitación iniciada por el consorcio ya extinto de la Platja de Palma, realizar una nueva aprobación inicial de la documentación y volverla a exponer al público para alegaciones durante un período de 30 días.

Asimismo, se solicitarán los informes preceptivos a distintos organismos y administraciones, quedando suspendidos los plazos de tramitación hasta que no se hayan emitido los que sean preceptivos.

Antes de la aprobación definitiva de esta modificación del PRI se deberá contar necesariamente con el informe del Consell Insular de Mallorca, además del favorable de la Dirección General de Aviación Civil.

Precisamente el pleno del pasado jueves procedió a la liquidación definitiva del consorcio urbanístico para la mejora y el embellecimiento de la Platja de Palma, integrado por los ayuntamientos de Palma, Llucmajor, el Govern balear, el Consell de Mallorca y el Gobierno central. Esta liquidación supondrá la aportación de 189.246 euros por parte de Cort.