La rotura de una tubería en el parque de sa Feixina a primera hora de la mañana de este sábado causó una espectacular inundación, que arrastró el agua potable por las escaleras y llenó la zona verde de líquido con barro.

Operarios de la empresa municipal Emaya se desplazaron al lugar y cortaron el suministro de inmediato para proceder después a arreglar la avería. Residentes de los barrios de Santa Catalina y es Jonquet se quedaron sin agua durante toda la mañana, mientras duraron los trabajos de reparación, tal como informó Emaya.

El reventón se produjo en la parte alta del parque, por lo que afectó especialmente al área de juegos y el tiovivo allí ubicado, cuyo entorno se llenó de barro y tuvo que ser limpiado.

Se trata de una de las tuberías antiguas de la ciudad, cuya red más obsoleta tiene más de cuatro décadas, por lo que el consistorio palmesano está cambiándola de forma paulatina a medida que ejecuta obras de remodelación en diferentes zonas de Palma.