Los usuarios de las piscinas municipales de Son Hugo podrán volver a nadar en ellas a principios del próximo año, cuando hayan finalizado las obras de reforma adjudicadas ayer. La instalación exterior fue clausurada hace tres años por riesgo de derrumbe, ya que la estructura se encontraba en un pésimo estado, y la interior también sufrió diversos cierres temporales. Tras el retraso en la importante remodelación, este equipamiento situado junto a la vía de cintura y el hipódromo de Son Pardo será "un referente de gestión energética sostenible y eficiente", según el concejal de Deportes, Francisco Ducrós.

El IME (Institut Municipal de l'Esport) aprobó ayer adjudicar las obras por 3,1 millones de euros con un plazo de ejecución de seis meses. El responsable político calcula que "podrían comenzar en junio, por lo que estarían listas a finales de año o, como mucho, principios de 2021". Los más de 60 trabajadores que intervendrán deberán reparar los vasos de las piscinas, debido a que el acero galvanizado que las sustenta está totalmente corroído y la base de hormigón de la estructura se ha levantado.

Además, se instalarán sistemas de geotermia y biomasa con el fin de lograr una "economía circular" y reducir en más de la mitad las 830 toneladas de CO2 que emitía cuando el agua de las piscinas se calentaba con obsoletas calderas de gas natural. La reforma integral también supondrá la sustitución de toda la iluminación por Led, como se está haciendo en el resto de equipamientos deportivos.

La contratación se distribuye en dos lotes, uno de 1,6 millones para las empresas Myrtha Pools y A&T Europe Spa, encargadas de "reparar y adecuar la estructura y la zona perimetral de las playas y los vasos de todas las piscinas, y hacer mejoras en la sectorización de los productos químicos en la planta subterráneo"; y otro de 1,5 millones para Urbia Intermediación Ingeniería y Servicios S.A. Ellos asumirán la renovación de los sistemas energéticos en base al proyecto que ha elaborado la empresa INTI Energía.

Entre las novedades en materia de sostenibilidad y eficiencia, se instalará una caldera de biomasa polivalente que reutilizará restos de poda de los parques y jardines públicos como combustible y con la que se generará un sistema de economía circular del municipio. Además, se instalarán bombas de calor geotérmicas y nuevas calderas de condensación, y se creará un circuito de baja temperatura, según detallaron ayer desde el Institut Municipal de l'Esport. Las piscinas de Son Hugo iniciaron su transformación hacia la energía sostenible el año pasado con la colocación de 370 placas solares en su azotea.