La Zona 30 del Rafal y el Vivero ha entrado en vigor este martes, después de que el Ayuntamiento de Palma haya recepcionado las obras que finalizaron hace semanas.

Desde hace semanas, las calles de entrada a esta zona 30, la más grande de Palma, cuentan con la señalización vertical y horizontal para indicar a los conductores que reduzcan la velocidad.

La nueva Zona 30 del Rafal y Vivero se suma a la de Son Sardina y a la de Santa Catalina, la anterior que se puso en marcha. En total se han instalado 105 señales de gran formato y se han pintado 87 símbolos sobre la calzada, en rojo, para advertir a los conductores.

Las obras han supuesto una inversión de 201.846 euros y se han ejecutado en los últimos meses.