Vecinos de Palma denunciaron este sábado mediante un vídeo las persistentes aglomeraciones en mercados municipales como el de Pere Garau, donde durante la mañana podía verse cómo muchos clientes y empleados se olvidaban de respetar la distancia de seguridad para evitar el contagio de coronavirus.

En las imágenes se aprecia que a pesar de existir líneas de color rojo en el suelo para delimitar la distancia de seguridad adecuada, estas solo son respetadas por algunos de los ciudadanos, que sí se distancian del vendedor pero que, mientras hacen cola para ser atendidos, no se separan un metro de los demás clientes.