Casi 3.000 familias han recibido ayuda de los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Palma durante estas semanas de confinamiento. En poco más de un mes Cort ha destinado más de un millón de euros para dar respuesta a los ciudadanos en peor situación, cifras que aumentan semana tras semana.

Catalina Trobat, coordinadora general de Bienestar y Derechos Sociales, remarca que el volumen de trabajo que han atendido desde que se decretó el estado de alarma es el doble de lo que se solía tener por estas mismas fechas el año pasado. Tanto el gasto en ayudas como la demanda registrada en estas semanas equivalen a lo que se tramitaría en dos meses y medio de un año "normal", destaca Trobat.

El perfil de quien solicita ayuda no ha variado, "personas que no pueden llegar a final de mes por distintas circunstancias", pero sí "se ha disparado" la demanda.

Hasta este pasado miércoles, en estas semanas de confinamiento, las distintas oficinas de Servicios Sociales han tramitado, vía telefónica, 4.222 ayudas económicas por valor de 1.105.000 euros, que han ido a parar a 2.785 familias.

Los barrios de Pere Garau, El Molinar, Coll d'en Rabassa, Can Pastilla, Nou Llevant y la Soledat son los que han concentrado mayor número de demandas que se atienden, pero por el sistema de registro de llamadas, Trobat avanza que la próxima semana se tramitarán más ayudas a residentes del Eixample y del distrito Centro.

Como ya explicó el Ayuntamiento la pasada semana, la gran demanda de solicitudes ha obligado a ampliar las líneas telefónicas y a crear una centralita con seis trabajadores que descongestionan durante diez días las oficinas de Servicios Sociales más colapsadas.

Si antes era posible que hubiera una lista de espera para ser atendido de unos diez o quince días, esta oposibilidad ahora no se contempla. "Priorizamos y tramitamos rentas sociales garantizadas extraordinarias", añade la coordinadora de Bienestar Social. Llevan tramitadas 850 de estas ayudas.

Esta crisis, añade Trobat, ha hecho necesario replantear el funcionamiento y las formas de intervención de los servicios sociales. "Tenemos que ser más ágiles, más eficientes y tenemos que cubrir las necesidades básicas", añade. La actual situación ha obligado a priorizar las demandas que les llegan y a dejar 'aparcadas' otro tipo de ayudas que también gestionaba Bienestar, como las relativas al cuidado de niños o otro tipo de ayudas para personas mayores.

Propuestas del PP

El grupo municipal del PP anunció ayer que presentará una batería de once medidas de carácter social para "priorizar la atención a los más vulnerables" durante esta crisis del coronavirus y anticiparse a la exclusión social. Entre sus propuestas, esta formación reclamará ayudas para entidades del tercer sector y eximir del pago de alquileres a los inquilinos de una vivienda del Patronato Municipal de la Vivienda.