Más de 25 entidades vecinales, en concreto 27, han suscrito un manifiesto en el que apoyan la decisión del equipo de gobierno del ayuntamiento de Palma de hacer efectivo el abono de 400.000 euros para sufragar las distintas líneas de subvención destinadas al mantenimiento de las asociaciones y las actividades que se realizan en los Casals de Barri.

Las entidades firmantes, entre ellas la de Son Rapinya, sa Calatrava, Son Oliva, Rafal Vell, Cas Capicol-Son Busquets, Barri Cívic de Santa Catalina, Nou Llevant, Verge de Lluc, Vogar i Ciar, es Fortí, el Puig de Sant Pere, Canamunt, el Coll y el Coll d'en Rabassa, recuerdan a los concejales del PP y Vox, Julio Martínez y Sergio Rodríguez, respectivamente, que "saben, o deberían saber", que lo que aprobó el Ayuntamiento la semana pasada "es el gasto realizado durante el año 2019 por las asociaciones vecinales" tras haber presentado cada factura y justificado su correspondiente pago.

Además, recuerdan que el dinero "no pasa por Juan Forteza -en referencia al presidente de la Federació d'Associacions de Veïns-, sino que el Cort lo ingresa en la cuenta de cada una de las 38 asociaciones vecinales" que, a su vez, "abonan los salarios de las 20 personas contratadas como dinamizadoras y los más de cien monitores".