La Empresa Municipal d'Aigües i Clavegueram (Emaya) ha decidido dar la posibilidad de aplazar cuatro meses el pago de los recibos de suministro de agua potable, recogida de basuras, tratamiento de aguas residuales y el canon de saneamiento a aquellas empresas, comunidades y particulares que lo soliciten.
Con esta medida se pretende ayudar a las empresas y familias que han visto mermados sus ingresos debido a la pandemia del coronavirus para darles la posibilidad de abonar estas facturas, que en el caso de una familia representa un gasto medio de entre 20 y 25 euros mensuales, una vez superada esta situación y retomada la actividad. El cobro de los recibos atrasados se retomará en los últimos meses del año, a razón de un 30% por recibo teniendo en cuenta que las facturas son bimensuales.
El teniente de alcalde de Medio Ambiente y presidente de Emaya, Ramón Perpinyà, recordó asimismo que esta empresa bonifica los recibos a aquellas familias cuyos ingresos anuales no superen los 16.525 euros con un 100% de la cuota fija del consumo del agua potable, el 80% del agua residual y el 75% del canon de saneamiento. Hasta ahora, 897 hogares están acogidos a esta medida pero Perpinyà vaticinó que "cuando acabe la cuarentena esta cifra podría aumentar". El regidor explicó que el objetivo de esta medida es "dar un respiro económico" durante las semanas de cuarentena y también "facilitar" el regreso durante los primeros meses cuando se vuelva a la actividad.
Por otro lado, manifestó que Emaya, desde que se ha declarado el estado de alarma, ha desinfectado 2,5 millones de metros cuadrados de calles con agua y lejía. En total, utiliza unos 3.000 litros diarios de lejía y 150.000 de agua. La desinfección de estos espacios por la pandemia de coronavirus empezó el 18 de marzo y la superficie limpiada equivale a 312 campos de fútbol, según informó.
Para aumentar las actuaciones de limpieza, se ha reforzado el turno de mañana con más vehículos y equipos, y con un nuevo turno de tarde y dos camiones cisterna que trabajan por las noches, con la intención de llegar a toda la ciudad e incrementar las limpiezas puntuales en entradas de centros sanitarios, hospitales, áreas de contenedores, supermercados y farmacias.
Cabe destacar también que el Área de Bienestar Social del ayuntamiento de Palma ha concedido un total de 2002 ayudas económicas a 1.475 familias por un importe de 543.640 euros desde que se decretara el estado de alarma.
Colaboración de los payeses
Por otro lado, los agricultores del Pla de Sant Jordi hicieron ayer, desde las 20 horas, una limpieza desinfectante en colaboración con Emaya en esa localidad, mediante seis tractores con 12 payeses voluntarios. Emaya les entregó lejía y equipos de protección EPI.
Según cómo funcione la experiencia, se repetirá la próxima semana y si es viable se hará en s'Aranjassa y sa Casa Blanca.
En este sentido, cabe destacar además que los bomberos han participado en tareas de limpieza, actuando de momento en la zona de Levante, y el Área de Infraestructuras asume la limpieza de farolas, paradas de autobús, escaleras públicas y mobiliario urbano.
Emaya destina a estas desinfecciones dos camiones cisterna en horario nocturno y 5 en horario diurno; 3 baldeadoras; 7 equipos de presión; y 3 equipos especiales autónomos.
