La cantidad que el Ayuntamiento de Palma desembolsa cada año para indemnizar a ciudadanos y a empresas que le reclaman alguna compensación se disparó durante 2019. De hecho, la cifra fue cuatro veces mayor que la partida de 2018 y muy superior a la de anteriores ejercicios. Cort pagó un total de 1,6 millones de euros, un montante que se disparó debido a la obligación de indemnizar a una empresa promotora de un centro comercial en es Carnatge y a la que se le anuló la licencia concedida en 2009.
En obligaciones reconocidas, el Ayuntamiento pagó el pasado año un total de 1.648.338,71 euros, una cifra que casi iguala la suma de lo pagado en los cuatro ejercicios anteriores.
Negocio frustrado
De estos 1,6 millones, el grueso (un total de 1,4 millones de euros) se ha destinado a indemnizar a la empresa Inversiones Son Manuel, que hace años proyectó una superficie comercial en terreno urbano en es Carnatge pero que resultó ser incompatible con la actividad aeroportuaria.
El Ayuntamiento concedió la licencia de obras para este proyecto en 2009, pero años después, debido a que el lugar donde se había comenzado a construir quedaba muy cerca del aeropuerto y el proyecto carecía de autorización por parte de AENA, el propio consistorio anuló este permiso.
El solar acogía el antiguo campo de fútbol del Coll d'en Rabassa, instalación que los propietarios habían alquilado al Ayuntamiento de Palma, arrendamiento que se sumaba a los ingresos recibidos por las vallas publicitarias que había instaladas allí. Ante la posibilidad de construir un centro comercial donde se ubicaría un Decathlon, los dueños solicitaron los permisos al Consell de Mallorca y al Ayuntamiento, que le concedió la licencia de obras.
Tras años de litigio y discrepancias entre la empresa denunciante y Cort acerca del montante de la indemnización, en 2018, el Tribunal Superior de Justicia de Balears fijó una compensacion de 3,6 millones de euros. Debido a la cuantiosa cifra, el consistorio tenía la posibilidad de pagar a plazos, como son estos 1,4 millones de euros.
A otras empresas se destinaron 68.961,5 euros en 2019, mientras que a ciudadanos particulares se pagó un total de 176.325,69 euros. Los particulares suelen reclamar por daños sufridos en la vía pública y que pueden ser achacables al Ayuntamiento, como caídas por el mal estado de la acera o la caída de un árbol sobre un vehículo, como sucedió hace meses con el bellasombra de la plaza de la Reinabellasombra de la plaza de la Reina. Para reclamar, los ciudadanos tienen dos vías, como recuerdan desde Cort: directamente por responsabilidad patrimonial o recurriendo a los tribunales.
En cuanto a las reclamaciones por responsabilidad patrimonial, también hay que hacer un trabajo de comprobación de los justificantes presentados para evitar la picaresca, según señalan desde el departamento de Hacienda.
Dejando al margen el pasado año, 2016 fue el ejercicio en que el Ayuntamiento pagó más dinero en indemnizaciones, un total de 633.196 euros, ya que cumplió con sentencias pendientes de pago y afrontó la indemnización a la viuda del bombero fallecido en un incendio en 2010, que supuso más de 130.000 euros.
También ha habido años que han finalizado sin llegar al presupuesto fijado. Es el caso del 2012, en el que las obligaciones reconocidas sumaron 391.428 euros, por debajo de los 486.695 previstos, o el 2017, en que al final se pagó cerca de la mitad de los 500.000 euros presupuestados.
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