La Platja de Palma contará con cinco cámaras de vigilancia, una fija y las cuatro restantes móviles, como explicó ayer el portavoz del equipo del Pacto en Cort, Alberto Jarabo. La junta de gobierno dio el visto bueno al pliego de cláusulas administrativas para contratar la adecuación en la zona del sistema de videovigilancia, ya que lleva años sin funcionar.

Además de la incorporación de cuatro cámaras móviles y una fija, se contratará por 30.000 euros en total el servidor y el hardware que se necesitan, una reclamación de los vecinos y la Policía desde que se averiaron las viejas cámaras.