Como se hizo en sa Riera este verano, todos los tramos urbanos de los torrentes de Palma serán limpiados por el Ayuntamiento. Mientras Cort y la conselleria de Medio Ambiente redactan un convenio sobre las competencias de cada uno, Emaya y el área de Infraestructuras adecentarán de forma conjunta los lechos de los torrentes con el fin de “atender una demanda vecinal”, ya que es su “responsabilidad”, y para ser “más rápidos y eficaces”, según afirmó ayer la regidora del área de Infraestructuras del consistorio, Angélica Pastor.

La junta de gobierno aprobó modificar el contrato de vialidad para destinar 170.000 euros a este objetivo. Es la fórmula que han encontrado a la espera de tener un acuerdo definitivo sobre los torrentes con el Govern balear.

Además, la junta de gobierno aprobó la expropiación de varios solares ubicados en la zona del Camí Salard, el Camí Vell de Sineu y la calle Biniamar destinados a formar parte del anunciado carril bici del Camí Salard. “Este trámite permitirá continuar ampliando la red de carriles y conectar mejor los barrios”, tal como destacó el portavoz del equipo de gobierno de Cort, Alberto Jarabo. La futura obra conectará las barriadas del Rafal y el Vivero con la red actual de carriles bici, que alcanza los 80 kilómetros de extensión.

Otros acuerdos de la junta de ayer fueron la creación de locales de ensayo en Son Fortesa para músicos, como avanzó este diario, y la municipalización de ocho educadores sociales para atender a personas con discapacidad, que estaban externalizados.