Emaya ha instalado una nueva fuente de agua potable filtrada en la calle Sant Miquel de Palma, concretamente en la esquina con la plaza de la Porta Pintada.

Según ha informado el Ayuntamiento de Palma, la iniciativa está "especialmente" pensada para llenar botellas y cantimploras reutilizables, con el objetivo de promover el consumo de agua del grifo y reducir el consumo de plástico.

Asimismo, ha informado el Consistorio, también tiene un sistema para beber aunque no se disponga de recipiente y como novedad incorpora otra salida para poder dar agua a los perros.

En este sentido, han destacado que la instalación se ha hecho en el marco de la Cumbre por el Clima COP25 que se está actulmente celebrando en Madrid.

Por otro lado, desde el Ayuntamiento de Palma han informado que esta fuente es la segunda de estas características que se ha instalado en la ciudad.

La primera, ha recordado la institución, se encuentra en la Plaza del Mercat y es fruto de la colaboración con la ONG Cleanwave.

Asimismo, ha informado Cort, está previsto que la próxima semana se coloque otra fuente de estas características en la zona del Portitxol y más adelante se pondrán más en otros puntos de la ciudad.

Por otro lado, el Ayuntamiento de Palma ha querido hacer hincapié en que la iniciativa cumple dos objetivos para "básicos" para Emaya, que son fomentar el consumo de agua del grifo y reducir el consumo de plástico, que es una de las líneas estratégicas recogida en el Programa local de Prevención de Residuos Municipales de Palma.

En este sentido, el Consistorio ha recordado que se calcula que actualmente los habitantes en Baleares consumen cada año 175 litros de agua envasada, unas 117 botellas de 1,5 litros, que suponen un gasto de 61 euros anuales por persona y la generación de cinco kilogramos de residuos de plástico. Esto, ha concluido Cort, supone para el conjunto de Palma unas 2.000 toneladas de residuos de plástico anuales.