El aeropuerto de Son Sant Joan estudiará la posibilidad de cerrar el aeródromo por la noche, como se hace en numerosas ciudades europeas, con el fin de reducir el ruido que perjudica a los vecinos. El director desde hace poco más de un mes, el mallorquín Tomás Melgar, se comprometió ante las asociaciones vecinales afectadas a analizar el problema, tal como ha manifestado el presidente de la Federación, Joan Forteza, tras el reciente encuentro mantenido con el responsable de la tercera infraestructura aeroportuaria más importante del país.

Los portavoces de los vecinos le explicaron todas las molestias que sufren en verano, sobre todo este último, en el que "el ruido ha sido brutal, con casi un millar de operaciones diarias en agosto, y con numerosos aviones que salen a medianoche de Gran Bretaña, por lo que con el cambio horario, llegan aquí en plena madrugada", en palabras de Forteza.

Por otra parte, lamenta que ni el Ayuntamiento ni el Govern "se posicionen políticamente para defender a sus ciudadanos y tratar de influir en el cierre nocturno, a pesar de que son miembros del comité de rutas aeroportuarias y podrían intervenir en su gestión".