El belén de la tienda C&A ya se puede ver. Inaugurado ayer en el patio del establecimiento, en la calle Sant Jaume, a ritmo de villancico, fue un reclamo para los vecinos y paseantes. Se suma a la larga lista de belenes que estas fiestas se montan en iglesias, conventos y en el vestíbulo del Ayuntamiento. Se podrá ver hasta el 10 de enero en horario comercial.

La Agrupación Bona Gent de Santa Catalina entonó clásicos del repertorio navideño como Los campanilleros, Fum fum fum y el muy ovacionado Los peces en el río. Hubo quien se acercó y no dudó en ponerse a bailar.

Antonio Vázquez de la Torre, director del establecimiento comercial, contó que "la novedad de este año es el cambio de perspectiva del Belén; lo hemos rebajado de altura para que lo puedan ver mejor los niños".

De pequeños se va a llenar la próxima semana ya que son más de veinte los colegios de Palma, y del resto de la isla, que se han apuntado a la visita.

Entre los asistentes a la apertura del Nacimiento, Pedro Costa, el maestro belenista que cada año hace algunos de los belenes que se pueden ver en Palma. La próxima semana se inaugurará el del Museo Militar en la calle Sant Miquel.

"Cuando me retiré, me aficioné a hacer belenes", explica este belenista de más de 80 años que no niega "ser un manitas". Su oficio fue restaurar muebles.

En el de los almacenes C&A se ven paisajes propios de Mallorca. Costa asegura haber confeccionado todo el Belén con "productos naturales", y ha echado mano del porexpan.

Tras el canto de villancicos, los asistentes comieron los primeros turrones de las prenavidades.