La asociación Es Refugi dio el pistoletazo de salida a su tradicional mercado solidario, que cumple 29 años esta edición. Desde la apertura fueron llegando muchos vecinos, curiosos y turistas interesados en aportar su granito de arena a la causa mientras compran entre la ingente cantidad de artículos que hay. La entidad abrió sus puertas el jueves y la jornada continuará este viernes y sábado de 11 de 20.30, en una gran carpa situada en el Patio de la Misericordia de Palma.

Los visitantes podrán disfrutar de un evento en el que habrán hecho un gesto solidario. Es Refugi invertirá todo el dinero recaudado en el comedor social y el centro de acogida que gestionan, para seguir ofreciendo comida y cobijo a las personas en exclusión social que necesitan ayuda urgentemente.

Desde ropa y zapatos de marcas conocidas hasta verdaderas obras de arte como cuadros, figuras y objetos de decoración. Así como turrones y otros dulces navideños. Los organizadores han dispuesto de un puesto de comida donde los participantes podrán recuperar energías para continuar con la jornada, con un menú de 16 euros. Además, tendrá lugar una tómbola donde los ganadores podrán conseguir cheques para ir a restaurantes, ropa y muchos regalos más.

El presidente de Es Refugi, Fernando Villalobos, valoró muy positivamente la gran afluencia de personas que se dirigieron a la carpa en la primera hora de apertura. "Nos interesa que esta propuesta se consolide y aumenten los ingresos para seguir ayudando a personas que lo necesitan", valoró.

Villalobos informó de que atienden a unas 150 personas al día pero alertó de que a pesar de los esfuerzos de la entidad, mucha gente "queda fuera del sistema". "Nosotros solo podemos atender a 44 personas en nuestro centro de acogida. Si hubiese más centros de acogida públicos o privados la situación sería diferente", indicó. Aunque avanzó que se está planteando la construcción de un segundo refugio especial para mujeres debido a la alta demanda que existe.

Es Refugi también cuenta con el apoyo de aportaciones de grandes cadenas de supermercados, entidades bancarias y asociaciones y complejos hoteleros que les permiten continuar con su labor.