Durante todo este martes una excavadora estuvo derribando un edificio que llevaba varios años abandonado, después de que sus vecinos fueran desalojados. Se trata de un inmueble declarado en ruina del barrio de Camp Redó, una de las zonas más castigadas de la ciudad, donde desde hace años se desarrolla un proyecto para mejorar la zona. Este edificio, conocido como el Bloque 8 del barrio de 'Corea', llevaba varios años abandonado. Las familias tuvieron que marcharse del inmueble, muchas de ellos en contra de su voluntad. El Ayuntamiento expropió las viviendas privadas e indemnizó a los propietarios, que con el dinero recibido tuvieron que buscarse otro domicilio. Cort gastó 600.000 euros en expropiaciones a los propietarios.

Por el evidente estado de abandono que mostraba el edificio, los vecinos de esta barriada llevaban mucho tiempo pidiendo al Ayuntamiento que lo derribara y aprovechara el solar. Desde el área de Urbanismo de Cort se presupuestó una partida de 130.000 euros para derribar el inmueble y retirar los escombros, que serán reciclados. Para ello, a primera hora de la mañana de ayer una excavadora empezó el trabajo de ir derribando toda la estructura de hormigón. Fue un trabajo lento y complicado. Para evitar que la caída de algún cascote pudiera causar heridos se acordonó la zona, impidiendo el paso por el perímetro por donde se desarrollaba esta obra. El trabajo más lento será la retirada de las toneladas de escombros. Está previsto que este trabajo de retirada se prolongue durante casi un mes. Todo el material de obra será reciclado.

La concejal de Urbanismo de Cort, Neus Truyols, mostró ayer su satisfacción por el derribo del inmueble y recordó que era un proyecto que venían reclamando los vecinos desde hacía tiempo.El Ayuntamiento, que se ha convertido en el nuevo propietario del solar, tiene previsto desarrollar otro proyecto en este terreno. Truyols, si bien anunció que ya existe una idea sobre la mesa para aprovechar este solar, no quiso adelantar de qué se trataba, porque correspondía a otro departamento municipal. Sobre el derribo realizado ayer insistió en que forma parte del proyecto para mejorar esta barriada de la ciudad, donde además de mejorar los servicios de limpieza, también se está apostando por aumentar la seguridad e incrementar las actuaciones sociales.

Truyols destacó que, aparte de terminar con este edificio en ruinas, el Ayuntamiento también está subvencionando trabajos de mejora en otros edificios de Camp Redó, aportando un presupuesto de 250.000 euros. Estas ayudas también se dedicarán a edificios de otras barriadas de Palma que precisan de reformas urgentes.

El Ayuntamiento de Palma ha ejecutado esta mañana el derribo del bloque VIII de la barriada de Camp Redó, un edificio que se encontraba en estado de ruina. Una máquina excavadora ha ido derribando todo el bloque para convertir el solar en un espacio de uso público, donde está previsto que se levante otra edificación, aunque todavía no se ha anunciado el proyecto que está estudiando el Ayuntamiento.

Con respecto a la orden de desalojo que se acordó este lunes de un edificio del barrio de Pere Garau la concejal de Urbanismo confirmó el mal estado del inmueble y anunció que los técnicos municipales propondrán su declaración de ruina. Ello supone que los propietarios, o bien presentan un proyecto de rehabilitación integral de toda la estructura, o tendrán que abandonar sus casas y buscar un nuevo domicilio. De momento, la mayoría de familias han sido reubicadas en espacios municipales, aunque otros vecinos han sido acogidos por familiares.