El Ayuntamiento de Palma se ha visto obligado a clausurar el depósito de vehículos de Son Toells, tras la orden de la conselleria de Medio Ambiente, adelantada por Diario de Mallorca, que le obliga a cerrar estas instalaciones por no cumplir con la normativa medioambiental, además de imponerle una multa de 40.000 euros.

Pese a que la orden del Govern aún no ha llegado formalmente al Ayuntamiento de Palma, ya es conocida por los servicios jurídicos municipales y el equipo de gobierno ha decididolos servicios jurídicos municipales y el equipo de gobierno ha decidido, según se informó este lunes, acatar la medida cautelar que ordena la clausura de las instalaciones mientras prosiguen los trabajos de vaciado de vehículos de Son Toells y la redacción por parte de la concejalía de Infraestructuras del proyecto para adecuar el depósito a la normativa medioambiental en vigor.

Tras el cierre de estas instalaciones los vehículos que retire la grúa por incumplimiento de normativa de Circulación se llevarán, como hasta ahora, al depósito del estacionamiento subterráneo de sa Riera, del que los propietarios podrán recuperarlos una vez abonada la multa correspondiente y el coste del traslado del vehículo por parte de la grúa municipal.

Los vehículos que estén abandonados en la vía pública que no puedan circular, cuando haya finalizado la tramitación y sean considerados como residuos sólidos urbanos, serán retirados directamente por la empresa a la que se le adjudique el desguace y la descontaminación de los vehículos depositados en Son Toells.

Desde la concejalía de Seguridad Ciudadana, que gestiona el depósito municipal, se indica que la adjudicación de este contrato de descontaminación de los vehículos que son llevados a estas instalaciones y su posterior desguace está ya muy avanzado, aunque no se atreven a dar una fecha sobre su definitiva adjudicación. Para el resto de vehículos abandonados en la vía pública Cort está buscando una alternativa temporal, que puede ser desde un solar urbano asfaltado, hasta la utilización para este cometido la parte de Son Toells que está hormigonada. Todo ello en función de si Medio Ambiente acepta o no las alegaciones que se presenten en este sentido en los próximos días.

El incumplimiento de la normativa medioambiental por parte de las instalaciones de Son Toells es una cuestión que el Ayuntamiento de Palma conoce al menos desde hace dos décadas. No obstante, no fue hasta que un particular denunció ante el Seprona que se estaba cometiendo un presunto delito medioambiental al depositar los vehículos destinados el desguace directamente sobre el terreno, cuando Cort reaccionó e inició un proceso de vaciado del recinto para poder ejecutar las obras necesarias para adecuarse a la normativa ambiental.

En un informe del instituto armado se ponía de manifiesto que en Son Toells se producen vertidos de aceites y de otros productos contaminantes directamente al suelo.

Según este informe, la normativa actual exige que se adopten medidas para la protección del terreno y que se habiliten mecanismos para evitar la filtración del aceite y para la recogida de los líquidos contaminantes. Por su parte, desde la conselleria de Medio Ambiente se emitió un primer informe en el que se indicaba que "si bien existe peligro potencial para el medio ambiente, las actuales instalaciones incumplen el Real Decreto de vehículos fuera de uso de 2017, que establece las características técnicas que deben tener estos depósitos.

Por ello, se indicaba que, para que cumpla, el suelo debe ser cimentado y disponer de un sistema de recogida de aguas pluviales y de líquidos, entre 0tros requisitos.

Ahora la Conselleria ha ordenado, como medida cautelar, la clausura de estas instalaciones y ha iniciado un expediente para la imposición de una sanción al Ayuntamiento de 40.000 euros.

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