Soy muy fan de la gente que, cuando viaja, hace más fotos de sí mismo que del lugar que visita (como si no se vieran diariamente en el espejo). Supongo que soy de los que prefiere hacer las fotos a salir en ellas. Aunque quien sabe, si encuentro un palo de selfie que aguante la tonelada que pesa mi cámara, lo mismo empiezo a salir en mis fotos corrientes.