La ciudadana que hace dos no podía ser recibida de nuevo por el alcalde porque ya lo había hecho hace dos años, recibió ayer una agradable sorpresa por parte de la primera autoridad municipal. Desde alcaldía le llamaron para pedirle disculpas e insistieron en que vuelva a solicitar formalmente una nueva cita. Se trata de una persona que desde hace años lucha para conseguir que los locales de sa Gerreria le respeten el derecho constitucional que tiene al descanso y a la inviobilidad del domicilio. Algo que, por lo visto, debe ser recordado continuamente a los responsables municipales que siguen empeñados en que la actividad de ocio es compatible con la residencial y que, en una dejación de funciones impresionante, insisten en que los vecinos deben ponerse de acuerdo con los empresarios, como si el respeto a los derechos fundamentales puede ser objeto de negociación.
Los socialistas de Cort, de mudanza
Una vez finalizada la nueva compartimentación de las dependencias que ocupan los grupos municipales en la tercera planta del edificio municipal que da a la calle Cadena, ha tocado el turno de las mudanzas. Estos días el grupo municipal del PSIB-PSOE se está trasladando al espacio que hasta ahora ha ocupado Ciudadanos, mientras que los concejales del partido naranja se desplazan al utilizado hasta ahora por Podemos, que tiene exactamente la misma superficie que el de Vox por exigencia expresa del grupo ultraconservador. El partido morado ocupará el sitio de los socialistas y, como dato curioso, mantendrán los tabiques de la estancia eliminando el espacio único.
