Una ciudadana residente en la barrida de sa Gerreria no daba crédito ayer a la respuesta recibida por parte de alcaldía en relación a una solicitud formulada para entrevistarse con el alcalde, José Hila, con el fin de ponerle al corriente de los problemas que, en materia de ruidos, sigue arrastrando esta zona palmesana, que le han generado importantes problemas de salud. En alcaldía le han denegado la petición con la excusa de que ¡hace dos años! ya se vio con la máxima autoridad municipal. El hecho de que quería tratar con Hila sobre una cuestión distinta a la del pasado mandato no ha servido para desbloquear la situación y para que la guardia pretoriana que procura que el alcalde se aísle cada vez más de los problemas de la calle cambie de actitud.
El Defensor del Pueblo da la razón a los vecinos
Ha tenido que intervenir el Defensor del Pueblo dando la razón a los vecinos de Son Fuster-Las Palmeras para que el Ayuntamiento considere como parte interesada a la asociación vecinal en relación a un solar abandonado propiedad primero de una entidad bancaria y ahora del 'banco malo'. Los vecinos solo querían (y quieren) que Cort haga cumplir la normativa municipal y obligue al propietario a proceder a la limpieza del solar, ya que constituye un peligro.
Un 'tentempié' insostenible
Si Cort quiere dar ejemplo de Administración que lucha contra el cambio climático deberá sustituir el plástico que se utiliza en el 'tentempié' que se sirve los días de pleno por otro material más sostenible.
