El desahucio de un matrimonio de su piso de alquiler en sa Gerreria fue aplazado ayer por tercera vez. Stop Desnonaments Mallorca, Ciutat per a qui l'Habita y vecinos de Canamunt y de la misma calle, Forn del Vidre Vell, se personaron ayer para impedir el desalojo de la pareja.
Joan Segura, portavoz de Stop Desnonaments, indicó que el desahucio se aplazó, pese a que la comisión judicial había acudido hasta la vivienda de la pareja, y que ahora los juzgados deberán comunicar una nueva fecha. "Se ha aplazado porque no había suficiente policía y allí nos hemos reunido más de una veintena de personas", añadió Segura. Además, según esta entidad, la dirección general de Vivienda del Govern, ha sido informada e intentó ayer contactar con la propiedad del piso, aunque sin éxito.
El matrimonio reside en una vivienda que hasta hace poco era de protección oficial y que ahora es propiedad de Alquileres Sa Gerreria SL, al igual que el resto de bloques de esta calle. La disminución de ingresos de la pareja (él tiene 55 años, sin trabajo estable, y ella sufre una minusvalía del 53%) y la imposibilidad de asumir el pago del alquiler ha coincidido con el fin de su contrato, circunstancia que la propiedad del inmueble ha aprovechado para solicitar su desahucio, según explicó Segura.
Stop Desnonaments denunció una vez más ayer que los inquilinos de estos pisos sociales privatizados se están enfrentando a subidas de alquiler que oscilan desde los 200 euros a los 900, por lo que muchas familias son incapaces de asumir el pago. Por ello, Joan Segura reclamó una vez más que estas viviendas sean expropiadas y tengan utilidad social "para 50 desahucios".
