El pasado lunes cuando la brigada municipal iba a proseguir las tareas de limpieza en el torrente de sa Riera se encontró con la sorpresa de que el asentamiento ilegal compuesto por siete chabolas se había desmontado. Desde Cort indicaron ayer que no sabían quién había derribado estas barracas que durante años han estado emplazadas en el lecho a la altura del cementerio.

El mismo día que empezó la limpieza del torrente, la regidora Angélica Pastor, ya apuntó que "seguirían allí porque son personas que no se acogen a ningún servicio municipal y no se les puede obligar". El traslado de chabolistas debe seguir un procedimiento administrativo y judicial complejo. Se rumorea que siguen en otro punto del torrente.

Retirada de residuos del asentamiento.

Los residuos generados por el misterioso derribo de las chabolas empezaron a ser retirados el lunes y ayer concluyeron los trabajos con su traslado a Tirme.

No hay fecha aún de conclusión de la limpieza del torrente que en algunos tramos aún mantiene los restos acumulados de años. Con todo, los vecinos de la zona elogian la implicación de la regidora Pastor que "por primera vez ha actuado para hacer efectiva la demanda histórica ciudadana: torrente de sa Riera limpio", indicaron.